Los vacunados contra la COVID-19 con la segunda dosis de Vaxzevria, el preparado de AstraZeneca, no tienen más riesgo de padecer trombos raros que aquellas personas que no fueron inmunizadas, según revela un estudio publicado este miércoles en «The Lancet».
Este análisis, efectuado a partir de la base de datos de seguridad global de la farmacéutica anglo-sueca, se centró en un efecto adverso muy raro provocado por algunos preparados, como Vaxzevria, llamado trombocitopenia inmune trombótica inducida por vacunación (VITT), reseñó EFE.
Los expertos constataron que la incidencia estimada de VITT en personas que recibieron el segundo pinchazo de la vacuna de AstraZeneca es de 2,3 por cada millón de vacunados, similar a la observada en las poblaciones no vacunadas.
Después de la primera dosis, la incidencia estimada se situó en 8,1 por cada millón de vacunados, destacó el estudio.
«A menos que se detecte un VITT después de la primera dosis, estos resultados apoyan la administración de la segunda dosis de Vaxzevria en los tiempos previstos, de cara a ofrecer protección contra la covid-19, incluidas las variantes más preocupantes», agregó el directivo.
El vicepresidente ejecutivo de I+D de AstraZeneca, Mene Pangalos, reiteró en un comunicado que Vaxzevria «es efectiva contra todos los niveles de gravedad de la COVID-19», al tiempo que «desempeña un papel clave en la lucha contra la pandemia».
Por Agencia