Un golazo de volea de Jordi Alba en la prolongación del partido (1-2) desniveló el empate con el que parecía que iba a acabar el Betis-Barcelona disputado en el Benito Villamarín, donde el conjunto azulgrana certificó matemáticamente su clasificación para la próxima edición de la Liga de Campeones y deja a los verdiblancos tocados en su intento de entrar en la zona ‘Champions’ cuando quedan tres jornadas para que concluya LaLiga.
Después de una primera parte intensa e igualada pero sin goles, los tantos llegaron en la segunda, primero de Ansu Fati a los 76 minutos, contrarrestado muy pronto por Marc Bartra, y después el de Jordi Alba en la última jornada del partido.
Tras el deportivo pasillo que los visitantes hicieron a los locales por la reciente consecución del título de campeón de la Copa del Rey, el partido ya no tuvo tiempo para especulaciones porque el Barça podía certificar su clasificación para la próxima edición de la Liga de Campeones y el Betis aspirar desde la quinta plaza a uno de esos lugares que le mantuvieran en la pelea por estar en la máxima competición continental.
Los Xavi Hernández salieron adelantados, con una fuerte presión para tener el mando del balón, pero los del chileno Manuel Pellegrini no se arrugaron e incluso buscaron el recurso de sorprender a la contra a las avanzadas líneas rivales, que no contaban en esta ocasión con su central Gerard Piqué ni con el meta titular, el alemán Marc-André Ter Stegen, ambos con mermas físicas.
El primer aviso fue azulgrana en un centro lateral del francés Ousmane Dembélé y un intento de rechace del central argentino Germán Pezzella, que estuvo cerca de meter la pelota en su portería en una acción en la que el meta chileno Claudio Bravo salió mal parado en el muslo derecho.
A los diecisiete minutos tuvo que ingresar al campo en sustitución del chileno el portugués Rui Silva, quien a las primeras de cambio metió una mano milagrosa para que, entre él y el larguero, el remate de cabeza del central uruguayo Ronald Araújo no se convirtiera en gol.
La réplica llegó al borde de la media hora, con un fuerte remate desde lejos del centrocampista argentino Guido Rodríguez que repelió la cepa de un poste y el posterior intento de Sergio Canales al que respondió el meta brasileño Neto Murara, quien después de varios meses tomó la responsabilidad de cuidar la portería culé.
Bajó algo el ritmo en la última fase de la primera mitad y el partido se fue al descanso con el 0-0 inicial y con todo abierto para una segunda parte en la que se mantuvo el equilibrio.
Dembélé fue el primero que lo intentó, pero su remate su fue al lateral de la red cerca de un poste y después al Barça le costó cada vez más llevar la iniciativa ante un adversario que merodeó más el área visitante, hasta el punto de que Xavi metió en el campo al delantero gabonés Pierre-Emerick Aubameyang por el neerlandés Memphis Depay para cambiar la dinámica.
Poco después ingresó Ansu Fati y tras un par de minutos sobre el césped logró el 0-1 con un buen remate tras un preciso control, pero la alegría visitante duro tres minutos, hasta que el exbarcelonista Marc Bartra empató tras un buen centro de Fekir.
Se entró a la recta final del choque ya con el partido roto, con dos equipos que no querían el empate, y que se desniveló en el minuto 94, el cuatro y último de la prolongación, con un golazo de volea de Jordi Alba.
Por: Agencia