miércoles, junio 26

Tatuajes de obras maestras en la casa Rembrandt en los Países Bajos

Lilian Ramcharan sonríe confiada mientras el tatuador holandés «Hanky Panky» imprime en su omóplato el dibujo indeleble de un elefante copiado de una obra de Rembrandt.

La joven, originaria de Ámsterdam, es la primera en participar en el proyecto «El Rembrandt del pobre», que reúne hasta el domingo a cuatro tatuadores en un museo donde el maestro neerlandés trabajó en el siglo XVII.

«¡Es una oportunidad fantástica para crear un puente entre el registro popular y el mundo de la élite!«, afirma Henk Schiffmacher, también conocido como «Hanky Panky».

El artista, de 71 años y aspecto ‘rocanrolero’ cuenta que un colega suyo calificaba los tatuajes como los «Rembrandt del pobre«.

Aunque son más asequibles que un cuadro del maestro, no son «menos cuidadosamente ejecutados y seleccionados», subraya Henk Schiffmacher, muy conocido y que se jacta de haber tatuado a integrantes de las bandas Red Hot Chili Peppers, Pearl Jam y Motorhead.

«Me sentí muy honrada de ser la primera, y de ser (tatuada) por el mismo Henk«, cuenta entusiasmada Lilian, de 36 años, responsable de la seguridad del museo de la Casa Rembrandt, y cuyos brazos están cubiertos de tatuajes.

Similitudes importantes

Los visitantes pueden elegir entre varias docenas de tatuajes diferentes. Se proponen también molinos, autorretratos, personajes de obras e incluso la firma del pintor.

Noventa personas reservaron una cita para tatuajes, que cuestan entre 100 y 250 euros (110 y 270 dólares).

El museo también ofrece algunas franjas horarias sin cita previa.

«Una nueva generación de artistas del siglo XXI se instaló aquí«, en el edificio donde trabajaban en el siglo XVII Rembrandt, sus asistentes y sus alumnos, subrayó la casa de Rembrandt en un comunicado.

El museo estima que el trabajo de los tatuadores y del maestro holandés presenta similitudes importantes.

«Que se trate de grabados o tatuajes, todo comienza con un dibujo, que luego se aplica a la superficie con tinta y aguja«, relató el museo en un comunicado.

Pero mientras que el maestro de la edad de oro holandés utilizaba una placa de cobre y una hoja de papel para transformar su composición en grabado, «los tatuadores aplican su dibujo sobre la piel humana«, detalla.

«El resultado final es una obra de arte que llevas contigo para toda la vida«, concluye.

Por: Agencia