¿Triunfalismo o confianza?
"El éxito no es el final, el fracaso no es la ruina, el coraje de continuar es lo que cuenta".
Winston Churchill
Todo exceso está comprobado que es malo, dañino. Eso lo saben en su área médicos, economistas, ambientalistas, nutricionistas, psicólogos o entrenadores por sólo decir algunos. En política, también existe y no es la excepción de la regla, cuando confrontamos a un adversario, sin que en ello tenga un peso definitivo su tamaño o poder.
Goliat, el filisteo lo fue en ambos casos cuando retó a David, nos dice la Bíblica, quien usando una piedra y una honda derrotó al poderoso soldado y cambió la historia del pueblo de Israel. Otro ejemplo, el de la fábula del griego Esopo, sobre la liebre y la tortuga deja claro que la confianza, más que el triunfalismo, son distintas por poseer...