El padre de los jóvenes heridos tras el choque en la Circunvalación 1, Luis Chávez, fue de los primeros en llegar al sitio del siniestro ocurrido la mañana del 1 de enero. En su cabeza está fresco el recuerdo de ver a su nuera e hijos.
“Es un dolor muy grande. Mi hija estaba en el piso bocabajo vomitando sangre. Mi hijo quería pararse para ayudar a su novia. (…) Estaba todo cortado y en la cara le cogieron ocho puntos”, indicó Chávez en medio del llanto a Foco Informativo la tarde este marte 2 de enero en una entrevista telefónica.
El afligido padre destacó que su hijo Luis lo llamó luego que la camioneta Renault Kangoo Express, conducida por Guillermo Rafael Martínez, chocó contra el Nissan Sentra donde iban los hermanos Chávez y Adriana Carolina Mendoza Nava, la única víctima fatal de la colisión, quien era trabajadora de un hotel de la ciudad.
“Era una niña tan bella, elegante, especial aquí en la casa. La queríamos como una hija. Mi hijo adoraba a su novia. Te estoy hablando del dolor de un padre que perdió una nuera. Mi dolor no es por mis hijos porque gracias a Dios están vivos sino por ella que era una hija para nosotros ya. En poco tiempo se ganó el cariño de mi esposa y mío. Llegaba aquí y decía: ‘qué hacemos suegro’. Ella ayudaba y compartía”, señaló.
Golpe emocional
Explicó que la familia de Mendoza es originalmente de El Venado, municipio Baralt, sin embargo, sus padres están en Panamá de donde regresarían este año luego de terminar de arreglar la casa ubicada en el poblado de la Costa Oriental del Lago.
“La mamá llegará ahorita a las 4.00 o 5.00 de la tarde. Yo no la conozco en persona, pero sé mucho de ella por la hija. Su madre tuvo que adelantar su arribo por esto”, comentó.
Describió a la chica como “especial, excelente hija y una novia”.
Con la llegada de los servicios de emergencia la primera reacción del progenitor fue no complicar más la situación de sus muchachos con la noticias de la muerte de Mendoza.
“A mi hijo le dije anoche que su novia había fallecido”, destacó el padre de los heridos, quien añadió que tuvo que evitar que Luis viera el cuerpo de su novia cuando lo montaban en la ambulancia.
De frente a los rumores
Erik Chávez aprovechó la oportunidad para desmentir la versión de que sus hijos y Mendoza venían del centro y aseguró a este medio que ellos antes del choque estuvieron fue en la urbanización Altos del Sol Amada, vía el Aeropueto.
“Cuando llegaron los policías estaban diciendo que mi hijo se había saltado la isla. Yo sabía de donde venía mi hijo, venía de Altos del Sol Amada no del centro. Pero en la misma situación no les discutí porque yo estaba esperando a la ambulancia para llevarme a mis hijos”, expuso Chávez.
Aclaró que Luis, quien es percusionista de Las Chicas del Can, era quien manejaba el Nissan. Además, indicó que el choque ocurrió entre las 5.15 y 5.20 de la mañana.
“Vi al señor (Martínez) cuando se salió de la camioneta y se tiró al piso y vi a ese otro señor que bajó de la camioneta y se montó en otra camioneta negra. Cuando llegué no estaba la Policía ni la ambulancia solo dos o tres personas vendedores de aceite. (…) Yo me tarde entre cinco o 10 minutos en llegar allá por la cercanía que me encontraba”, contó.
Por: José Manuel Sánchez / Foto: Cortesía