«Como comunidad nos dirigimos a las autoridades porque un vecino decidió construir unas mesas y una plaza en un área verde. Él inició la construcción para levantar unos locales comerciales y a pesar de tener la orden de paralización, continuó la obra”, contó Isabel Faria, abogada de 43 años y administradora del edificio Rio Cachiri ubicado frente al espacio intervenido por la Alcaldía de Maracaibo en el sector Terrazas de Sabaneta.
Debido al desacuerdo entre la comunidad con respecto al proyecto que reunió nueve mesas de concreto, 16 postas y cinco estructuras metálicas tipo papeleras; se efectuaron varias reuniones con representantes del Centro de Procesamiento Urbano (CPU), pero tras la evaluación se determinó que el proyecto violentaba el literal c del artículo 49 en concordancia con el literal c del artículo 65 de la Ordenanza sobre Control Urbano del Municipio Maracaibo. De allí que se haya emitido una orden de paralización y luego una de demolición.
Yngrid Gutiérrez, directora de OMPU en el CPU, detalló que “las áreas de dominio público, las áreas comunales de los parcelamientos, como en el caso de Terrazas de Sabaneta, no tienen permitido ningún tipo de construcción sino para lo cual fueron creadas; es decir, cuando se permisa un parcelamiento a ellos se les exige, de acuerdo a la densidad poblacional, que se deje espacio para un área social, un área deportiva y un área verde, las cuales son administradas por el municipio para evitar, justamente, que la gente disponga de esos espacios”.
La construcción del infractor en Terraza de Sabaneta afecta a la comunidad, dado que un espacio público iba a estar bajo uso y explotación de un privado, limitando el esparcimiento de los vecinos que viven en cinco edificios con 35 apartamentos cada uno, lo que suma al menos unas 300 personas, sin mencionar las casi 60 viviendas aledañas que aumenta la cifra a 400 personas.
“Nadie quiere tener un terreno oscuro cerca de su casa porque eso promueve la inseguridad, pero cualquier proyecto tiene que evaluarse luego de que esté permisado y éste proyecto, tal como está, no cumple con las condiciones”, detalló Faria.
La OMPU emitió una orden de paralización de la obra de Terrazas de Sabaneta en agosto de 2022 y ante la negativa de acatarla, la comunidad destruyó las construcciones en diciembre del mismo año, las cuales fueron levantadas nuevamente por el infractor una semana después. Luego en febrero de 2023 fue emitida una orden de demolición voluntaria que no fue acatada y en ese punto la Alcaldía de Maracaibo ejerció su autoridad en esta materia y ejecutó la demolición de la obra.
“No es que no queramos que construyan nada, es que la obra no está pegada a derecho y por lo tanto no se puede concluir. Estamos complacidos con esta gestión porque se está viendo la recuperación de todas las áreas en el municipio, no solamente parques, sino carreteras y espacios que definitivamente requerían mano dura, contundente y eficaz. No solo se debe poner orden en casos como este, sino en cada uno de los que a la Alcaldía es competente”, concluyó Faria.
Por: Nota de Prensa