miércoles, diciembre 25

Gian Carlo Di Martino: Postrecitos de Huevos Chimbos

La vileza del alcalde de Maracaibo… Lo que hizo Rafael Ramírez como autoridad municipal con los trabajadores el Primero de Mayo, es una perversión. No les canceló su quincena argumentando irregularidades en la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre) y el Sistema Patria, solo por mal poner al Gobierno revolucionario con la clase obrera. Es un crimen utilizar a esos dignos hombres y mujeres en una guerra sin sentido en contra del presidente Nicolás Maduro Moros, que constantemente llama al diálogo, a la paz y a la tolerancia.

A mí no me engaña Ramírez con su gestión ficticia por las redes sociales; hago la denuncia viendo que tiene engañada a mucha gente, pero yo no creo en un político que creció en la pandilla de Primero Justicia bajo las alas de delincuentes como Henrique Capriles Radonski y Julio Borges. Los trabajadores y las trabajadoras son sagrados.

Algo bueno debe estar ocurriendo en Venezuela… Otra sorpresa. El canciller de Brasil, Carlos Franca, se paseó por la eventualidad de restablecer las relaciones diplomáticas con la Patria de Bolívar, Chávez y Maduro. Algunos medios de comunicación social lo publicaron pequeño, así como el que quiere y no quiere, supongo que para evitarles retortijones a los terroristas de la oposición en Venezuela y del exterior. Aunque estas decisiones no tienen su origen en el gobierno de Jair Bolsonaro, sino en el de Joe Biden. Bolsonaro no se manda solo. De cualquier manera, bienvenida esa posibilidad. Venezuela y Brasil son pueblos hermanos.

Por aire, mar y tierra, el general Domingo Hernández Lárez enfrenta a los Tancol… Hasta capturó un submarino de seis metros de largo en el río Arauca, estado Apure, utilizado por esos bandoleros colombianos para sacar subrepticiamente la droga de las mafias de Colombia a través del río Orinoco. ¡No pasarán!.

El general dijo en un tuit: “Recorreremos por cuadrantes y sectores asignados, los 2219 km del eje transfronterizo que nos separan de nuestro hermano país, en la búsqueda y expulsión de los grupos TANCOL, que pretenden operar en nuestro territorio”.

Si se descuida, lo asesinan… En un país donde, como dice la exsenadora Piedad Córdoba, han eliminado a seis presidentes (y yo le agrego que el narcoparaco Iván Duque mantiene una matanza en contra de los campesinos y campesinas y líderes y lideresas sociales que lo adversan), el candidato Gustavo Petro suspende una visita a la zona cafetalera de Colombia, ante la sospecha de que planean asesinarlo, y la policía sale a decir que no se preocupen, porque ellos no tienen indicios al respecto.

Esa es la misma policía homicida al servicio de Duque, el mismo grupo de exterminio que mató públicamente a los manifestantes que protestaban al narcogobierno de ese criminal… Petro debe tener extremo cuidado, porque enfrenta a mafiosos altamente peligrosos. A Duque y a Uribe Vélez les importaría muy poco asesinarlo. Y no les ocurre nada. Tienen la justicia de su país comprada y el apoyo de los genocidas del imperio norteamericano.

El ensañamiento contra el diplomático Alex Saab… Hacen casi dos años que por órdenes del imperio norteamericano, el gobierno de Cabo Verde, vigente en ese momento, hizo preso en junio de 2020 al embajador plenipotenciario de Venezuela en África; no olvidemos que todos los movimientos ejecutados en contra de nuestro funcionario, han sido dirigidos directamente por los genocidas del norte.

Desde su detención, comenzaron las manipulaciones del proceso judicial en el cual lo implicaron con la ayuda de la justicia del país africano, que lo único que hizo fue cumplir con la copia exacta de las instrucciones que le daban esos hegemones asesinos.

No podemos dejar de insistir en que Alex Saab fue víctima de las medidas coercitivas y unilaterales que los norteamericanos le impusieron a Venezuela, porque, en lo que a nosotros atañe, es uno de los aspectos que mas los pone en evidencia como criminales.

Debemos recordar que las abominables perversidades de los estadounidenses en contra de nuestro diplomático, se debieron a que comerciaba los alimentos, los fármacos y la gasolina, que ellos (los estadounidenses) no querían que llegaran a la Patria de Bolívar, con la firme intención de que los venezolanos y venezolanas acorralados, sin comida y sin medicinas, se le rebelaran al presidente Nicolás Maduro y así coronar el golpe de estado que buscan desde que “El Gigante” Chávez llegó al poder.

Los gringos no pudieron legalmente extraditar al embajador Alex Saab, hasta que finalmente optaron por secuestrarlo y llevárselo, sin embargo, tampoco han podido con la dignidad del diplomático. No logran que se preste a sus marramuncias en contra de Maduro.

En Cabo Verde, lo torturaron, le partieron tres dientes, le cortaron las muñecas, lo tenían casi sin agua, sin comida, sin medicinas y, conociendo a los norteamericanos, se podrán imaginar las torturas psicológicas que actualmente sufre detenido en EEUU. No hay un preso que haya salido de una cárcel gringa que no dé cuenta sobre el terrible tormento que esos genocidas le infligen a los reos; no obstante, Alex Saab continúa firme en sus convicciones.

Desde esta tribuna seguimos exigiendo su justa libertad, e invito a seguir la batalla por el amor y la justicia en este planeta.

Ahora todos quieren ser presidentes… El golpista, fugitivo y homicida, Leopoldo López, pide que se celebren las primarias en la oposición cuanto antes, para elegir el candidato que se enfrentará a Nicolás Maduro Moros en las elecciones presidenciales de 2024.

Increíble. Todos los terroristas que embarcaron a una buena cantidad de venezolanos y venezolanas en la aventura del golpe de estado, actualmente quieren ser candidatos, presidentes, desde Venezuela o el exterior. Muchos llamados les hizo Maduro para que retomaran el camino democrático y no quisieron, prefirieron decantarse por la violencia. En consecuencia, los compatriotas que perdieron la vida por sus criminales acciones están muertos, y ellos buscando poder y más dinero. Qué burla, qué desprecio hacia sus seguidores.

La putrefacción del ejército colombiano… Resulta que el candidato presidencial Gustavo Petro, dijo en un tuit: “Mientras los soldados son asesinados por el Clan del Golfo, algunos de los generales están en la nómina del Clan. La cúpula se corrompe cuando son los politiqueros del narcotráfico los que terminan ascendiendo a los generales”.

De inmediato, el general Eduardo Zapateiro, comandante del Ejército colombiano, reaccionó respondiéndole a Petro con un hilo en Twitter: “Desde el 2021, más de 500 militares han sido asesinados y heridos durante el cumplimiento de la misión y su sacrificio fue invisible, no hubo pronunciamientos. Curioso que ahora la muerte de los héroes de la patria sí genere aflicción y sea usado para otros señalamientos».
Luego el alto jefe militar escribió: “Usted como senador hace parte del colectivo al cual osa señalar como politiqueros del narcotráfico. Como ciudadano le recomiendo no generalizar. El respeto ante todo”.

En ese estilo, el oficial escribió otros post. Y ante esta situación, a Zapateiro le abrieron una investigación por cuanto los militares en Colombia tienen prohibido ejercer una posición política y tomar partido en candidaturas y elecciones.

No voy a defender a Petro, pero, primero, comparto la vinculación que hace del ejército colombiano con el narcoparamilitarismo, eso está suficientemente demostrado, por lo menos en Venezuela. Los Terroristas Armados, Narcotraficantes de Colombia (Tancol) usan las armas de los militares de ese país para atacar en nuestro territorio. Obviamente, esos bandidos forman parte de ese componente de la FAN colombiana, o alguien de ahí les debe suministrar el armamento.

Segundo, el general Zapateiro, aparte de ser señalado por su vinculación con los falsos positivos, apoyó la matanza que sus uniformados ejecutaron en el departamento del Putumayo. Y por si fuera poco, hablamos del oficial que cuando murió Jhon Jairo Velásquez, alias Popeye, un temible asesino a la orden del legendario Pablo Escobar Gaviria, jefe del cartel de Medellín, le expresó públicamente conmovido las condolencias a los familiares de ese criminal.

Hablamos de todo un hampón comandando el Ejército putrefacto de Colombia, al que le abren una investigación por su injerencia en la candidatura presidencial, cuando desde hace tiempo debería estar preso por bandido. Así de hipócrita es la justicia santandereana.
8-. Migrantes venezolanos… Muchos hermanos partieron de Venezuela engañados por la oposición en busca de un mejor futuro, pero se estrellaron con la realidad en el exterior, y ahora quieren volver y no pueden ni reunir los pasajes de regreso.

Curiosamente consiguieron en nuestro país en crisis el dinero para irse, pero donde están no pueden obtener el de retornar. ¿Paradojas de la vida?, claro que no. La realidad se impone. En el exterior, toda la plata que obtienen trabajando de sol a sol se les va en pago de servicios, comida y sobre todo arriendo. El alquiler de cualquier casa o habitación les vale un dineral.

Por fortuna, en Venezuela contamos con Nicolás Maduro, un presidente revolucionario campeón del amor, la tolerancia, la solidaridad, la paz y la sensibilidad humana. En la medida de lo posible, les pondrá a disposición un avión de nuestra línea bandera, Conviasa, enmarcado en el Plan Vuelta a la Patria, para su feliz regreso.

La venganza del narcoparaco Iván Duque… Los capos y mafiosos no perdonan. La venganza es su norte. Y eso hace el narcoparaco Iván Duque sabiéndose derrotado en las elecciones presidenciales del próximo 29 de mayo: vengarse.

Se venga del candidato Gustavo Petro, que no me cabe la menor duda de que le ganará los comicios si se da una contienda transparente, honesta, cuestión que no es nada fácil con el imperio norteamericano de por medio. Se venga de Venezuela y lo que es peor, se venga de su propia gente. Una monstruosidad la que ejecuta ese homicida en Colombia.

Y eso lo comprueban decisiones como las que tomó recientemente sobre el covid-19. Consciente de su descalabro en la candidatura presidencial, ordenó que, a partir del Primero de Mayo, dejará de ser obligatoria la presentación del carnet de vacunación al ingresar a eventos públicos y privados.

De la misma manera, el uso del tapaboca quedará suspendido en espacios cerrados, excepto los servicios de salud, los geriátricos, el transporte y las instalaciones educativas.

¿Por qué toma esa decisión? Obviamente que para embochincharle el gobierno al nuevo presidente, que posiblemente con esas medidas tendrá que enfrentar un país con un repunte de la pandemia. Contra Petro, sino es que no lo asesina, Iván Duque pondrá en práctica esa y muchas maniobras más que lo puedan perjudicar en el Palacio de Nariño.

Duque, igualmente, se venga de Venezuela porque mi país no cede a las pretensiones norteamericanas ni de los narcotraficantes y paramilitares como él. Ataca a la Patria de Bolívar desde la llamada comunidad internacional con mentiras, calumnias, y a lo interno por la frontera que tenemos en común, principalmente por el lado del estado Apure. Por allí arremete con los llamados Tancol.

Recordemos que los Terroristas Armados, Narcotraficantes de Colombia participaron de la mano de Duque y el narcotraficante Juan Guaidó, en el intento de invadir a Venezuela militarmente por Cúcuta.

Pero lo más deplorable es la venganza de ese bandido contra su pueblo, que no está dispuesto a seguir apoyando a facinerosos en el Palacio de Nariño. Ese narcoparaco asesino sigue la matanza en su país, de campesinos y campesinas y defensores y defensoras de los derechos humanos.

 

Por Gian Carlo Di Martino