jueves, noviembre 21

El hedor y las aguas residuales inundan las casas del sector Las Salinas

La avenida 4-A del sector Las Salinas, en el barrio 18 de Octubre, en Maracaibo, tiene cerca de 20 años a la espera de que algún ente público repare un bote de agua que afecta a más de 100 familias y que mantiene a los vecinos inmersos entre el hedor y las aguas servidas, además de propensos a enfermedades.

María Araujo, una de las afectadas, informó que empezó a sufrir de enfermedades en su piel, porque le cayó agua podrida mientras caminaba por la calle y así como ella los niños corren riesgo de enfermarse por el mismo problema.

Las aguas residuales no sólo afectan a los que viven en la avenida 4-A. Quienes viven en las avenidas 3 y 4, adyacentes a la del problema, también resultan perjudicados, bien sea por la hediondez o la falta de gas doméstico del cual carecen porque las tuberías se inundan.

“Cuando llueve no hay gas porque todas las tuberías del gas están rotas. Entonces no tenemos ni gas, agua, luz ni las cloacas para completar”, indicó Araujo.

En busca de soluciones, los afectados hablaron con el Concejal de la zona, hicieron reuniones, entregaron cartas e incluso hablaron con personal de Hidrolago.

“Hidrolago nos dice que se debe arreglar primero las tuberías del gas, porque todas están rotas, entonces entre las tuberías rotas y arreglar las cloacas no hay solución y la junta comunal tampoco hace nada. Pedimos que nos arreglen el problema de las cloacas más que todo”, indicó la vocera.

Mientras esperan por una solución estos vecinos de la parroquia Coquivacoa, al norte de la ciudad, utilizan arena para bloquear el avance de las aguas y mitigar la pudrición.

Texto y fotos: José Manuel Sánchez