Las autoridades de inmigración de Estados Unidos ya no encarcelarán de manera rutinaria a las migrantes que enfrentan la deportación si están embarazadas o dieron a luz recientemente, revirtiendo una política del gobierno de Donald Trump.
La directriz anunciada el viernes no impide al Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE por sus siglas en inglés) iniciar procedimientos para deportar a mujeres que están embarazadas, amamantando o que dieron a luz en el último año. Pero en general, ya no serán detenidas mientras se resuelven sus casos, excepto en “circunstancias excepcionales”, indicó la agencia.
Grupos defensores de inmigrantes y de mujeres han dicho que la práctica de encarcelar a migrantes embarazadas amenaza la salud materna y fetal. Estos grupos también han criticado la atención médica en los centros de detención para migrantes.
“Esto refleja nuestro compromiso de tratar a todas las personas con respeto y dignidad y al mismo tiempo hacer cumplir las leyes de nuestra nación”, señaló Tae Johnson, director interino del ICE.
El cambio es parte de un esfuerzo más amplio de la administración del presidente Joe Biden para revertir algunas políticas de la era Trump y aplicar políticas similares a las del gobierno de Barack Obama. Hace poco, el ICE adoptó un borrador de pautas para enfocar las detenciones en personas que ingresaron sin permiso al país recientemente, que representen una amenaza para la seguridad nacional o que cometieron un delito grave.
Si bien estos esfuerzos enfurecieron a los opositores a la inmigración, la cantidad de personas detenidas aumentó drásticamente en los últimos meses. Hay más de 27 mil personas bajo custodia del ICE, en comparación con menos de 14 mil a fines de marzo, según datos compilados por la organización Transactional Research Access Clearinghouse (TRAC) de la Universidad de Syracuse.
Casi el 80 por ciento de los que se encuentran bajo custodia del ICE no tienen antecedentes penales, y la mayoría de los que tienen es principalmente por delitos menores, según TRAC.
Los defensores elogiaron el anuncio del viernes, pero dijeron que no era suficiente. La Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) pidió al gobierno que deje de detener a cualquier persona que pudiera estar en riesgo durante la detención, según publica AP.
Por ley, el ICE está obligado a detener a algunos migrantes, incluidos extranjeros que han sido condenados por ciertos delitos o actividad terrorista. La agencia se comprometió a que el número “muy limitado” de mujeres embarazadas detenidas bajo la nueva política recibirá atención médica regular según sea necesario.
Cualquier niño nacido en Estados Unidos automáticamente tiene la ciudadanía estadounidense.
Por: Agencias / Foto: Cortesía