Una reserva que acoge a 25 leones en Sudán lanzó un llamado de alerta el domingo ante el hambre que sufren los felinos y la escasez de electricidad, que amenaza la resistencia de las vallas de seguridad.
La reserva Al Baqer, situada a una hora en coche al sur de Jartum, la capital, advirtió que se está quedando sin comida para alimentar a los mamíferos, que consumen entre 5 y 10 kilos de carne al día.
El centro también alertó que no tiene electricidad para alimentar las vallas de seguridad de los recintos.
A pesar de los enfrentamientos, «seguimos con los animales todos los días (…) pero la falta de electricidad es una amenaza real: nuestros dispositivos de seguridad [para las puertas eléctricas] dependen en gran medida de ella«, advirtió la reserva.
Sudán está sumido en una espiral de violencia desde el 15 de abril, por la lucha que libran las fuerzas de dos generales en el poder.
Los violentos enfrentamientos han dejado hasta ahora más de 420 muertos y 3.700 heridos en la nación, de unos 45 millones de habitantes, indicó la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La reserva se encuentra «en las inmediaciones de una base militar por la que se está luchando«, señaló el Centro de Rescate de Animales de Sudán en un mensaje publicado en las redes sociales.
El centro, que se extiende sobre más de cuatro hectáreas, pide alimentos y combustible para los generadores. La reserva acoge también a «media docena de hienas, muchos changos, tortugas, pájaros, seis gacelas, dos camellos» y otros animales domésticos, precisó.
El número de leones africanos en el mundo ha disminuido un 40 % en tres generaciones, según ha advertido la oenegé WWF.
En la actualidad hay poco más de 20.000 ejemplares en libertad, entre ellos un puñado en el Parque Nacional Dinder de Sudán, cerca de la frontera con Etiopía.
Por: Agencia