Me ha llamado poderosamente la atención una encuesta muy reciente realizada por la firma Datanalisis, y dada a conocer de manera muy sorpresiva por Luis Vicente León, presidente de esta firma consultora en un programa de opinión , según la cual «er conde del Guacharo» lidera las preferencias de los venezolanos cuando nos encontramos a pocos meses de la realización de las primarias de la oposición democrática para seleccionar el candidato que enfrente las intenciones reeleccionistas de quien ha llevado a Venezuela a la destrucción, y «de cuyo nombre no quiero acordarme», parafraseando un poco a Cervantes.
Yo siempre he tenido como personas muy serias tanto a Luis Vicente León como a José Antonio Gil Yepez, quien es el otro directivo de Datanálisis, pero de verdad que me llama poderosamente la atención este resultado con un chistologo (no sé si habrá obtenido alguna profesión con el correr de los tiempos) encabezando una encuesta por encima de líderes políticos como María Corina Machado, Manuel Rosales, Henrique Capriles, Carlos Prosperi ( AD) y otros ampliamente conocidos.
Es cierto, también, que mucha gente no quiere saber de política por distintas razones, pero de allí a lo que presenta la encuesta en cuestión hay un trecho largo. Un periodista amigo que tiene las espuelas afiladas me pasó un comentario en el cual me dice: » Creo, sin que nadie me lo diga, sin preguntarle a nadie y sin que me quede nada por dentro, que «er conde del guacharo» es un comodín, un globo de ensayo del régimen, un buen comediante, pero un ALAKRAN solapado».
Creo que sí se trata de un comodín del régimen porque yo no he visto nunca al fulano conde enfrentar, ni con declaraciones ni con hechos, al gobierno de Nicolás Maduro, ni antes el del difunto interplanetario con quien se inició el desmadre de nuestro país.
Es que no quiero imaginarme que los venezolanos nos demos el lujo de tener a un presidente como er conde del guacharo. Venezuela sería un chiste todos los días. Chávez no era chistologo ni cómico y sin embargo vivía echando chistes, muy malos por cierto, mientras el país se derrumbaba.
Si la encuesta de Datanalisis me dijera que las preferencias las encabeza una María Corina Machado, no objetaría su pertinencia porque nadie puede negar que esa dama y valiente mujer se la ha jugado, independientemente que tenga mis reservas con ella por cierta anarquía que he observado en sus actuaciones. Que es Manuel Rosales quien lidera las preferencias, tampoco lo pondría en duda por cuanto es bien conocida la popularidad que tiene Rosales, sobre todo en el Zulia por ser su Gobernador. Hasta de Enrique Capriles, un poco diezmado en su popularidad y de Carlos Prosperi, candidato de mi partido de quien hay que reconocer que no ocupa lugar privilegiado en las encuestas, pero con condiciones de sobra y con un partido fuerte que le sirve de base de sustentación.
Pero no me vengan a decir que este pueblo sería capaz de votar por un cómico para que nos venga a solucionar el desastre que ha causado esta revolución llenado hambre y miseria por los cuatro costados del país. Creo que sería una aberración, y este cronista que no se ha unido a la millonaria legión de venezolanos que han huido de Venezuela para escapar de esta atroz crisis, lo haría de llegar a darse un absurdo hecho como ese.
Estoy firmemente persuadido que la candidatura de «er conde» es una creación del régimen de Nicolás Maduro que hace poco el mismo lo lanzó de candidato. Maduro sabe que es rechazado por la casi totalidad del pueblo venezolano y ha mandado a inflar otra candidatura como si fuera de oposición, como única manera de mantenerse en el poder hasta el final de los tiempos.
Por Emiro Albornoz León