miércoles, diciembre 18

Países Bajos celebra elecciones legislativas sin desenlace claro a la vista

Los neerlandeses acudirán a las urnas el próximo miércoles para elegir al sucesor del primer ministro saliente Mark Rutte, en unas elecciones legislativas cuyo resultado es incierto, pero que transformará el panorama político del país.

Entre los candidatos está Dilan Yesilgoz, una política del mismo partido de centroderecha de Mark Rutte, quien estuvo 13 años en el poder, y Pieter Omtzigt, una figura anticorrupción que formó un partido hace apenas unos meses. Los sondeos los sitúan codo con codo.

«Cualquier persona que dice que sabe quién ganará estas elecciones miente«, declaró a AFP la politóloga Julia Wouters.

Los comicios deberán además marcar el inicio de un largo período de negociaciones para formar una coalición de gobierno en el país, quinta economía de la Unión Europea (UE).

Por detrás de los dos favoritos está el ex comisario europeo Frans Timmermans, que lidera una alianza de verdes y socialdemócratas. Es considerado un hombre de confianza con sólidas credenciales ecologistas, tras haber defendido el Pacto Verde de la UE.

El partido antislamista PVV de Geert Wilders también espera cosechar buenos resultados. Yesilgoz dijo que estaba abierta a una posible coalición con el partido de extrema derecha.

«Libertad y seguridad»

Yesilgoz, de 46 años, sucedió a Rutte al frente de la lista del partido de centro-derecha VVD. Nacida en Turquía, llegó a Países Bajos a los ocho años como solicitante de asilo y no oculta su ambición de reducir la inmigración.

«Llegué a este país como refugiada de ocho años y sé lo que significa buscar la libertad y buscar la seguridad«, declaró a AFP en un mitin reciente.

La llegada de solicitantes de asilo, así como de trabajadores y estudiantes internacionales es «demasiado elevada«, insistió. «Necesitamos reducir ese número para poder tener un espacio seguro para los verdaderos refugiados«, dijo.

Yesilgoz entretiene a sus seguidores de Instagram con fotos de sus perros y es omnipresente en las tertulias políticas holandesas. Pero sus críticos apuntan a que le cuesta articular políticas claras y explicar en qué se diferenciaría de Rutte, salpicado por los escándalos.

«Yesilgoz subraya que harán las cosas de manera diferente, sin entrar en detalles sobre cuáles serán las medidas clave«, analiza Sarah de Lange, profesora de ciencias políticas en la Universidad de Ámsterdam, a AFP.

«Mesías»

En las encuestas subió también un nuevo partido, llamado Nuevo Contrato Social (NCS) y fundado en agosto por el carismático denunciante y político iconoclasta Pieter Omtzigt.

El políglota de 49 años, educado en Reino Unido y en Italia, provocó un sismo político con su promesa de limpiar la política holandesa. También adopta una postura dura frente a la inmigración.

«La manera en la que hacemos política condujo a numerosas crisis sin traer ninguna solución«, declaró Omtzigt en una entrevista con AFP.

«Necesitamos un mejor control y para lograrlo necesitamos reformas, incluida una reforma del Estado holandés«, añadió.

Los votantes se enfrentan sin embargo a una gran pregunta: Omtzigt ha insistido en que no quiere ser primer ministro si gana su partido.

«Para mí, saber quién se vuelve primer ministro o incluso ministro es secundario«, dijo, sin descartar nombrar a una persona externa a su lista electoral como jefe de gobierno.

Wouters, la politóloga, señala que muchos neerlandeses lo ven sin embargo como «una suerte de mesías«. «Es básicamente un héroe nacional, pero mucha gente no sabe lo que representa realmente«, explica.

¿Un gobierno honesto?

El Movimiento Campesino-Ciudadano (BBB) aprovechó por su parte el enfado de los agricultores contra los planes medioambientales y obtuvo una impresionante victoria en las elecciones de marzo, convirtiéndose en el mayor partido del Senado.

Pero su popularidad parece estar disminuyendo, según las encuestas.

Según los votantes, los principales problemas son la inmigración, la crisis inmobiliaria, la sanidad y el nivel de vida.

Pero la reforma política también tiene su peso, lo que juega a favor de Omtzigt.

«La cuestión más importante para muchos votantes neerlandeses en este momento es cómo nos gobiernan«, afirma Wouters.

«El gobierno es honesto? Es transparente? Mucha gente cree que les han mentido bajo [el mandato de] Mark Rutte«, explica.

Por: Agencia