La primera declaración de Yadier Molina al aterrizar en el Aeropuerto Internacional Arturo Michelena de Valencia, el día viernes por la noche fue: “Estoy ansioso por conocer a los jugadores y establecer un lazo de confianza con ellos”. Un preámbulo de lo que se vería menos de 12 horas después en el Estadio José Bernardo Pérez de Valencia, durante su primera jornada al mando de las prácticas de Navegantes del Magallanes.
Las imágenes mostraban al puertorriqueño siendo recibido por los peloteros en el popular “Tunel”, un acto de bienvenida en el que se debe pasar en medio de dos filas de integrantes del equipo, mientras debe aguantar algunos golpes con guantes.
“La bienvenida fue muy buena. Los muchachos me dieron una pequeña paliza. La química, como le comenté a Ramoncito (Ramón Hernández, coach de banca) fue buena, trabajan fuerte, se ve que están gozando y eso es algo bien importante”, expresó en el Salón de Prensa del recinto de La Michelena, el espacio dispuesto para su presentación oficial a los medios de comunicación.
Molina, según los registros del periodista e historiador Tony Flores, se convertirá el 22 de octubre, durante el Día Inaugural frente a Tiburones de La Guaira en el sexto boricua que dirige en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, tras Marcelino Daviu, Joey Cora, Carlos Lezcano, Mako Oliveras y Pedro López.
“Como equipo campeón nos sentimos muy felices de contar con alguien que para mí es una leyenda viviente, un referente del beisbol”, dijo en sus palabras de apertura Maximiliano Branger, presidente de la Junta Administradora de Navegantes del Magallanes. “Ha demostrado en 19 años su calidad como pelotero y persona, por eso ha tenido tantos triunfos”.
El ahora expelotero nativo de Bayamón, de 40 años de edad, potencial Salón de la Fama de Cooperstown con los argumentos de contar con nueve Guantes de Oro como receptor, 10 convocatorias al Juego de Estrellas, dos anillos de Serie Mundial y ser el segundo receptor con más juegos disputados en Grandes Ligas (2.184), tendrá su primera experiencia como piloto en el beisbol invernal, aunque advierte que reúne de la sabiduría suficiente para asumir el reto.
“No he tenido mucha experiencia como manager, que esa es la gran pregunta de todos, pero he estado 19 años en Grandes Ligas conduciendo a lanzadores que, para mí, los pitchers y la defensa ganan campeonatos”, zanjó Molina, quien ya dirigió a la selección sub 23 de Puerto Rico en el Clasificatorio 2017 y Mundial 2018.
Sus maestros en el béisbol
El excareta cuenta entre sus mentores a nombres como Tony La Russa, segundo mánager con más victorias en la historia de la Gran Carpa (2.902), José “Cheo” Oquendo, instructor con más de 30 años de experiencia en Cardenales de San Luis, además de Dave Duncan, coach de pitcheo de dilatada trayectoria en el equipo donde disputó toda su carrera.
“Pasar más de ocho meses hablando de beisbol todos los días con ellos, te llena”, admitió. “De Tony aprendí mucho de cómo se tiene que llevar el juego, a los lanzadores, cómo hacer la química en la ofensiva”.
Sobre su estilo con Magallanes se mostró cauto. Antes desea tener un panorama más amplio con las piezas que podrá usar en el roster, y a partir de allí mostrarse flexible con los cambios en la nómina que caracteriza a la pelota del Caribe cada mes.
“He sido aficionado del beisbol durante muchos años de mi vida, en especial del beisbol invernal: Venezuela, República Dominicana, México y lo sigo desde hace mucho tiempo cuando jugaba en Puerto Rico”, detalló Molina. “Venezuela pienso que es un beisbol apasionado, que se juega de la mejor forma, y con parques llenos. Y ese juego me encanta, que la fanaticada se meta y los peloteros jueguen de la mejor manera”.
¿Cómo se dio su contratación?
Pablo Sandoval fue clave en la llegada de Yadier Molina a la Galera. “El Panda” es amigo del puertorriqueño, al igual que José “Cafecito” Martínez, y el puertorriqueño les expresó a ambos su deseo de dirigir en el beisbol invernal, luego de finalizar su última campaña como pelotero activo.
“Enseguida que nos enteramos de eso, brincaron las alarmas, nos llamó mucho la atención. Luis (Blasini, gerente deportivo) llamó a Yadier, recuerdo que fue una noche, como a las 8 o 9 pm”, narró Branger sobre el acercamiento que se dio a comienzos de abril. “No pasó mucho cuando Blasini me dijo que estaba listo. Creo que hicimos una llamada grupal a las 10 u 11 pm y desde ese momento quedó contratado».
Sandoval fue el encargado de decirle a Molina que la gerencia nauta buscaba piloto, luego de no llegar a un acuerdo con Wilfredo Romero. Y Molina respondió: “¿Por qué no? Venir con este equipo con tanta tradición y ganar juegos”.
“No crean que Yadier se está uniendo a Magallanes hoy por ser su primera práctica”, subrayó por su parte Blasini. “Nosotros conversamos por teléfono mínimo dos veces por semana desde el mes de abril. Ya desde mayo me estaba pidiendo los rosters y no sabía cuál enviarle, con cuál íbamos a jugar porque sabemos que nuestra liga es muy particular”.
Adición de lujo para la LVBP
Giussepe Palmisano, presidente de la Liga Venezolana de Beisbol Profesional y miembro del Consejo Consultivo de Navegantes del Magallanes, se refirió a la importancia que tendrá para el circuito contar con una figura del calibre de Molina.
“Para la LVBP, como presidente de la institución, es mucho mayor la satisfacción porque enaltece y eleva la calidad de esta liga con 75 años de historia”, indicó Palmisano. “Aquí han venido leyendas a lo largo de este trayecto, pero tener a Yadier Molina, luego de que mucha gente dudaba que tuviéramos a este prospecto como manager, pero jugador histórico, hará que se contagien muchas personas y jugadores que estarán presentes en la temporada”.
“Su presencia acá dice mucho, sobre todo por lo que han sido los últimos años, hemos tenido que salir a buscar licencias para que nuestra liga no caiga en su calidad”, continuó Palmisano. “En una primera etapa se consiguieron esas licencias y ahora las dos que faltaban. Desde el primer día (Molina) hizo saber que le gustaría contar con todos esos ‘caballos’”.
Por: Prensa LVBP