La Dirección Regional de Voluntad Popular en el estado Zulia se pronuncia para rechazar la contaminación de la que hoy es víctima el Lago de Maracaibo y, exigir políticas ambientalistas que permitan recuperar el reservorio de agua dulce más extenso de América del Sur.
En los últimos días, todos los ciudadanos han sido testigos de cómo la contaminación en el Lago de Maracaibo se ha incrementado producto de los derrames petroleros, la salinización del agua, la desembocadura de aguas residuales y la acumulación de desechos.
Desde Voluntad Popular lamentamos que el colapso de la industria petrolera en el país hoy sea responsable del desastre ambientalista que ocurre en el estuario marabino. En el Lago existían alrededor de cinco mil pozos entre activos e inactivos, más de 10 mil instalaciones petroleras que hoy están en total abandono y producen continuos derrames y goteos de petróleo. En el año 2022 hubo más de 32 derrames petroleros en el Lago, se estima que diariamente se derraman más de mil barriles diarios, sin que la estatal petrolera tenga una política ambientalista que frene la contaminación en el lecho lacustre.
En días recientes, también hemos visto como la aparición de algas cianófitas han aparecido y crecen sin control en el Lago de Maracaibo. Según los expertos, esto es causado por las descargas de aguas cloacales, de uso agrícola y desechos de la industria camaronera, lo que está causando la muerte y descomposición de la flora y fauna acuática.
Esta aparición de algas cianófitas representa un peligro para la salud de todos los zulianos y en especial, de los que habitan en las zonas costeras, ya que las personas al estar expuestas a esta bacteria pueden presentar dificultades respiratorias, afecciones en la piel, dolor de cabeza, vómito, problemas hepáticos y neurológicos.
Ante esta realidad del Lago de Maracaibo, desde Voluntad Popular nos sumamos al llamado de las distintas ONG y organizaciones ambientalistas que han solicitado que se declare en estado de emergencia el Lago. Los derrames petroleros y la contaminación no solo están afectando la flora y fauna del cuerpo de agua, sino que impide la pesca artesanal y representa un peligro para la salud de todos los que habitan y hacen vida en las costas del estuario marabino.
El Lago de Maracaibo necesita atención de forma inmediata para evitar que el ecosistema lacustre se siga deteriorando. Exigimos de parte del Estado venezolano una política ambientalista real, que la estatal petrolera se responsabilice de todos los daños que ha causado e implemente las correcciones y medidas necesarias para evitar más derrames petroleros, así como políticas de saneamiento, prevención y el uso de tecnología para rescatar el Lago de Maracaibo.
Por: Nota de Prensa