El profesor Manuel Aranguren, Vicerrector Administrativo de la Universidad de Los Andes, expresó lo que considera debe decirse sobre la universidad, asegurando “la universidad está viva, pero muy herida” en clara referencia al slogan usado en el mensaje de fin de año, emitido por el rector Mario Bonucci, en medios de comunicación y redes sociales.
El dirigente universitario fijó posición a través de un mensaje publicado el pasado jueves 16 de diciembre, en grupos de WhatsApp.
Haciendo un análisis casi poético, sobre los problemas que enfrenta la ULA, Aranguren señala:
1. «Está viva» pero aterra el gran número de personal que renuncia y que se jubila. Se ha perdido ese amor propio por la institución y ello quizás no pueda ser criticable ante los «sueldos de miseria» que se percibe y lo cual no permite alimentarse ni el trabajador ni su familia.
2. La ULA está viva, gracias a Dios, pero funciona sin haber recibido el presupuesto del año 2021. Da pena ver como no podemos comprar una resma de papel, como no se puede pagar un condominio y esto solo como un pequeño ejemplo, o sea, no tiene recursos para cumplir con ningún compromiso.
3. La ULA está viva, y esa es la verdad, por el gran esfuerzo de su comunidad, pero esta comunidad ante cualquier problema de salud tiene que vender sus bienes para poder cubrir los gastos que ocasiona el poder recuperar su salud ante tan difícil contingencia.
4. La ULA está viva y es verdad, pero esperando que en cualquier momento le suspendan el servicio de luz, agua, teléfono y otros servicios porque no se ha pagado en años ya que no recibe recursos para ello.
5. La ULA está viva, pero operando con un sector estudiantil que realiza un gran esfuerzo para poder sobrevivir en esta ciudad de Mérida. Sin transporte ULA, con becas de miseria, con un comedor cerrado y con una pobreza en muchos de ellos a cuestas. Muchos han tenido que dejar de estudiar para irse a trabajar y poder comer. Son los «héroes silenciosos» de nuestra casa de estudios.
Finaliza el profesor Aranguren, asegurando la ULA se mantiene de pie gracias a sus hijos pues dependencias e infraestructura, se están cayendo, “esta es la verdad y alguien tiene que decirla”.
Por Agencia