El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) advirtió este viernes que las graves inundaciones que han afectado a Pakistán desde junio han dejado a unos 10 millones de niños necesitados de “apoyo inmediato de emergencia”.
El director de Unicef para el Sur de Asia, George Laryea-Adjei, aseguró, tras visitar algunas de las áreas más afectadas por las inundaciones, que “cerca de 10 millones de niños necesitan apoyo inmediato de emergencia, cientos han perdido ya sus vidas”, reseñó EFE.
“Los niños que he conocido lo han perdido todo: a sus seres queridos, sus valiosos libros escolares, los únicos hogares que conocieron, sus escuelas, su sentido de seguridad”, subrayó Laryea-Adjei, de acuerdo con un comunicado de Unicef.
Uno de cada nueve niños en el país sufre de desnutrición aguda severa, una condición que puede suponer la muerte. Ante esta situación, los padres, “presas del pánico”, están buscando de manera desesperada algo con que alimentar a sus hijos, agregó.
Entre los principales peligros para los niños están también las enfermedades transmitidas por el agua o relacionadas con su estancamiento, como pueden ser la diarrea, la malaria, el dengue, la fiebre tifoidea, o infecciones respiratorias aguas.
Además, “a medida que se acerca el invierno, los niños y niñas hacinados dentro de tiendas de campaña endebles, cuando tienen la suerte de tener una, seguirán sucumbiendo a enfermedades que en tiempos normales son previsibles y tratables”, remarcó Laryea-Adjei.
Desde mediados del pasado junio han muerto en el país por las inundaciones 1.731 personas, entre ellas 645 niños, del total de 33 millones de paquistaníes afectados por una crecida de las aguas que han destruido de manera total o parcial más de un millón de casas.
El director regional de Unicef destacó que los menores son víctimas de un desastre meteorológico desencadenado por un cambio climático del que no tienen culpa, pero “son los que están pagando un mayor precio” por sus devastadores efectos.
En lo que va de año, el Sur de Asia se ha visto afectado gravemente por unas inundaciones agravadas por el cambio climático, dejando a más de 15 millones de menores necesitados de asistencia en Pakistán, Bangladesh, el norte de la India o Afganistán, o corrimientos de tierra en Nepal, subrayó.
Esta “catástrofe climática” está amenazando la salud, el bienestar y la supervivencia de más de 616 millones de niños y niñas en la región, advirtió Laryea-Adjei.
“Sin una acción global urgente, la devastación climática que hemos visto en Pakistán solo será, me temo, un precursor de muchas más catástrofes por venir que ponen en peligro la supervivencia de los niños”, sentenció.
Por Agencia