Las exportaciones de cereales ucranianos se reanudaron este miércoles después de que Rusia volviera al acuerdo, mediado por la ONU y Turquía, para establecer un corredor marítimo seguro en el mar Negro.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, dijo ante el Parlamento turco que «los envíos de granos continuarán a partir de las 12H00 horas de hoy, como estaba previsto», tras una llamada telefónica entre los ministros de Defensa turco y ruso.
El ministerio de Defensa ruso confirmó su regreso al acuerdo tras haber recibido «garantías escritas» de Ucrania sobre la desmilitarización del corredor utilizado para el transporte de granos.
«Rusia considera que las garantías que recibió hasta ahora parecen suficientes y reanuda la aplicación del acuerdo», aseguró el Ministerio en un comunicado.
El coordinador de la ONU para la iniciativa de granos en el mar Negro, Amir Abdulla, saludó en un mensaje en Twitter «el regreso de Rusia» al acuerdo.
Desde que se instauró el pacto, cerca de 10 millones de toneladas de granos ucranianos pudieron ser exportadas a través del mar Negro.
El acuerdo permitió aliviar la crisis alimentaria global desatada tras la invasión de Ucrania por Rusia a finales de febrero.
Según los términos del acuerdo, sellado en julio, los barcos que entran y salen de Ucrania son inspeccionados por un equipo conjunto de funcionarios turcos, de la ONU, ucranianos y rusos.
Pero Moscú anunció el sábado que suspendía indefinidamente su participación después de acusar a Ucrania de un «masivo» ataque contra su flota del mar Negro amarrada en Crimea.
Una serie de llamadas telefónicas en los últimos días entre funcionarios rusos y turcos, incluida una el martes entre Erdogan y el presidente ruso Vladimir Putin, y la mediación de la ONU, parecen haber convencido a Moscú de reconsiderar su postura.
«Peligroso sin Rusia»
El presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, dijo que se necesita una «defensa fiable y a largo plazo» del corredor, mientras que su homólogo ruso exigió «garantías reales» de que respetará el acuerdo.
En una llamada con Zelenski el martes, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, denunció la decisión de Rusia de abandonar el acuerdo diciendo que «vuelve a perjudicar la seguridad alimentaria mundial«.
Ucrania había rechazado las acusaciones de Rusia como un «falso pretexto» para retirarse del acuerdo.
El Kremlin criticaba el acuerdo, alegando que la mayoría de los envíos llegaban a Europa, y no a los países pobres donde más se necesitaban esos cereales.
Los funcionarios ucranianos negaron esa afirmación y los datos recopilados por un grupo de control como parte del acuerdo no reflejan esta afirmación.
Los buques siguieron navegando el lunes y el martes, pero la ONU dijo que cualquier movimiento de barcos después de que Rusia anunciara su suspensión era «una medida temporal y extraordinaria«.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, dijo el lunes que era «peligroso» continuar con las exportaciones sin la participación de Rusia.
El Ministerio de Defensa ruso afirmó el miércoles que obtuvo garantías escritas de Kiev «gracias a la participación» de la ONU y a la «ayuda» de Turquía.
Aseguró que Kiev garantizó «la no utilización del corredor humanitario y de los puertos ucranianos determinados en interés de la exportación de productos agrícolas para llevar a cabo operaciones militares contra la Federación Rusa«.
Restricciones de electricidad
Rusia replicó el lunes al ataque contra su flota en Crima con una nueva serie de bombardeos masivos contra infraestructuras críticas ucranianas, lo que provocó cortes de agua y luz, sobre todo en la capital, Kiev.
El operador ucraniano, Ukrenergo, anunció el miércoles nuevas restricciones de luz, y el alcalde de Kiev, Vitali Klitschko, prometió desplegar mil puntos de calefacción para que los habitantes afronten el invierno.
Zelenski indicó que los ataques rusos habían dañado el 40% de las instalaciones energéticas de Ucrania, lo que llevó al país a detener las exportaciones a la UE, donde los precios se están disparando.
En el frente, el Estado Mayor ucraniano informó de combates, principalmente en el este, y de bombardeos contra 25 localidades del este, el centro y el sur.
El gobernador de la región oriental de Donetsk, Pavlo Kyrylenko, informó de la muerte de cuatro civiles en las últimas 24 horas.
Las autoridades rusas de ocupación en la región de Jersón anunciaron el martes la evacuación de miles de personas de la zona, tras haber trasladado a casi 70.000 personas la semana pasada.
Ucrania denunció las evacuaciones como «deportaciones» de su población por parte de Rusia.
Por: Agencia