viernes, noviembre 22

Transportistas pasan «a riesgo» hacia Colombia por la frontera de Paraguachón

Choferes que laboran en las coperativas wayuu de transporte binacional que hacen vida en el terminal Elías Gónzalez, ubicado en la parroquia Idelfonso Vásquez, confirmaron a Foco Informativo que desde el pasado lunes 9 de enero el paso hacia Colombia está habilitado por Paraguachón, en Zulia.

«Ya los militares venezolanos nos dejan pasar», indicó un chofer wayuu que no quiso identificarse, mientras esperaba sentado a otros pasajeros para completar uno de los viajes en horas del mediodía de este miércoles 11 de enero.

Detalló que la frontera con Paraguachón se está «normalizando» sin embargo, alertó que los transportistas que cruzan lo hacen «a riesgo», porque la mayoría no cuenta con la documentación reglamentaria que exigen las autoridades colombianas.

«Nosotros estamos cruzando porque los pasajeros lo exigen, pero corremos el riesgo que en Colombia nos pongan preso el carro», señaló.

El profesional del volante ve «complicado» actualizar la documentación que exigen  ya que, entre los permisos, la póliza de seguro y las placas pueden gastar más de un millón de pesos es decir, como unos 200 dólares.

«Aquí no se hacen tantos cobres (dinero), solo para medio comer y mantener el carro», indicó otro de los choferes que al ver declarar a su compañero se acercó para también dar a conocer su punto de vista.

Ahora el tema de la documentación se suma a la lista de problemas que vienen cargando los transportista binacionales como son: la mala vialidad y la inseguridad.

A pesar de los inconvenientes, los choferes no ocultaron sentirse esperanzados en que el flujo de personas mejore, aunque aclaran que cada día son más «los pasajeros que llegan pidiendo rebajas del pasaje» que oscila entre 20 y 25 dólares.

«Aquí llegan personas que nos dicen tenemos solo 15 dólares y qué vamos hacer los tenemos que llevar».

El paso de vehículos por la frontera en Zulia se habilita una semana después que se autorizó por el puente Atanasio Girardot, en el estado Táchira

Por: María Gabriela Villalobos / Foto: Lizaura Noriega