Salvadoreños juegan con la muerte en colorido festival
Centenares de salvadoreños cerraron la madrugada de este sábado en el distrito de Tonacatepeque el festival de la Calabiuza, en el que entre gritos agudos de espanto cobran vida la muerte y personajes de la mitología local.
La lluvia no fue impedimento para que «carretas chillonas» llenas de calaveras, antorchas y otros objetos de espanto, salieran desde el cementerio hasta terminar en la plaza central de Tonacatepeque, 25 km al norte de San Salvador.
La «Llorona», el «gritón de la medianoche» y las «Almas en pena», con gritos, alaridos y danzas hicieron sonreír a lugareños y extranjeros.
Llamaron la atención las coreografías y travesuras de esqueletos vivientes y personas mitológicos como la Siguanaba, el Cipitió y el padre sin cabeza, que asustaron a los distraídos.
«Es una emo...