Los cacerolazos volvieron a las calles 22 años después de la peor crisis de Argentina
Entre la medianoche y la madrugada de este jueves las calles de Buenos Aires se cubrieron con el estruendo metálico que genera golpear utensilios de cocina contra cacerolas. Acompañados por bocinazos y bajo el grito de “¡El pueblo no es casta!”, centenares de personas rodearon la sede del Congreso de la Nación, en Buenos Aires, para protestar contra la terapia de choque económica decretado por el presidente Javier Milei.
Armado con una cuchara de madera y una cazuela vieja, Darío, un trabajador ferroviario de 55 años, observaba con un gesto de aprobación a los manifestantes que se colgaban de las rejas del Parlamento para arengar a la multitud cercana. Su indignación como ciudadano y como trabajador lo había llevado hasta ese lugar, confesó a EFE.
“Las medidas que anunció Milei por dec...