Antiguo bastión opositor sigue celebrando la caída del régimen de Al Asad
Dos semanas después de la caída del régimen de Bachar al Asad, los ciudadanos de Idlib, capital de la provincia homónima y bastión opositor durante más de una década en el norte de Siria, siguen celebrando la «liberación» y «el fin de la tiranía».
Mustafa Samara, de 36 años y trabajador humanitario, afirma a EFE que «solo la idea de la caída del régimen era un sueño de todos los sirios» y se alegra porque ahora los niños crecerán «en un país donde no habrá tiranía ni dictadura».
«Tras todo este sufrimiento, matanza y destrucción durante 14 años, el pueblo sirio merece esta alegría y las celebraciones en todas las zonas liberadas», agrega sobre el ambiente festivo que se vive en el centro de la localidad, a donde ha llevado a sus hijos «para que sepan por qué empezó la revolución y entien...