El partido de Evo Morales expulsa al presidente Luis Arce y agrava la guerra política en Bolivia
El décimo congreso del Movimiento al Socialismo (MAS), el partido que gobierna Bolivia, dio el paso definitivo para la división que estaba incubando desde hace años. El Congreso "aceptó la autoexpulsión" de Luis Arce y David Coquehuanca, presidente y vicepresidente del país, por no asistir a la reunión que se efectuó en el pueblo de Lauca Ñ, en la zona cocalera del centro del país, y ordenó que el Tribunal de Ética del partido expulse también a otros 20 diputados del ala afín al Gobierno de Arce.
Además, como se preveía, ratificó al "comandante" Evo Morales como presidente del partido y como su candidato a la presidencia para las elecciones de 2025.
"Seguimos haciendo historia nacional e internacional. El MAS va a recuperar la revolución para salvar la patria nuevamente", señaló Mora...