Participar y votar para bien
La ciudadanía es un concepto activo. Es una condición que se interioriza hasta lo más hondo y es inseparable de quien la posee. Y es así por el amor a la patria, por sentido de pertenencia a la comunidad que consideramos propia y a la que no aspiramos cambiar por otra, por la responsabilidad que uno siente en contribuir a alcanzar el bien común, por el derecho irrenunciable a participar y a reclamar calidad de vida, con todo lo que ese elevado concepto envuelve. Se participa siempre. Se exigen los derechos siempre. El lenguaje, la actitud y la conducta del ciudadano son proactivas, no de indiferencia ni de pasividad.
Participar no es una apuesta ni un acto de astucia. No es una decisión que se toma cuando la propuesta que haces o el candidato que apoyas lucen con chance de ganar o te in...