Las ventas en los supermercados del país han aumentado, pero aún hay trabas que les impide crecer. Se requieren medidas urgentes como la modificación del Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras (IGTF) para que el sector pueda enfrentar el segundo semestre de 2023 con mejores expectativas.
El presidente de la Asociación Nacional de Automercados y Autoservicios de Venezuela (Ansa), Ítalo Atencio, detalló que se hace necesario bajar esa tasa a 0,5 por ciento o eliminarlo. “Otra propuesta es convertirlo realmente en un Impuesto a las Grandes Transacciones Financieras pero que lo cobre la banca cuando transacción pase por sus sistemas y no que lo pague el consumidor en el establecimiento, ni que se establezca en aquellos productos que pasan hasta por cuatro eslabones para llegar al comercio”.
Para el representante gremial, eso mantendría la defensa de la moneda nacional y disminuiría la inflación, porque no se pagaría ese tres por ciento del IGTF en cada etapa por la que pasa un mismo bien, detalla El Carabobeño.
Durante su visita a la 6ta edición de la Expo Venezuela Gourmet, Atencio también hizo referencia a la disminución de los tributos nacionales, regionales y municipales y a que se requieren créditos. “Si tenemos financiamiento para el capital de trabajo e inversión, el sector crecerá a la tasa que crece en otros países, y aquí lo hemos hecho todo con pulmón propio”.
Balance positivo
Los reportes de la Ansa durante el primer trimestre de 2023 indican que las unidades vendidas, en comparación con el mismo periodo del año pasado, y en 110 categorías medidas, crecieron en 9 por ciento, mientras que, en abril, respecto al mismo mes de 2022, aumentaron cuatro por ciento.
Otro indicador que evaluaron fue la Canasta Ansa, que engloba a 82 productos para una familia de cuatro personas y que en enero costaba 301 dólares, y en abril 256 dólares. “Los precios bajaron porque los comerciantes han tenido que hacer promociones diversas para atraer a consumidores a las tiendas”.
El tercer medidor es el número de tiendas abiertas, remodeladas o que cambiaron modelo de negocio, siendo 14, de enero a abril, cuando el año pasado fueron 44 y en 2021 se contabilizaron 61. “Esto indica que el sector sigue en movimiento… Sacamos el pie del acelerador, pero el vehículo sigue andando. Estamos mirando con convicción, pero con precaución los retos que tenemos”.
Atencio señaló que el sector se enfrenta a tener un mejor margen de sustentabilidad para poder invertir, crecer y tener atención al cliente, pero no es fácil por la carga fiscal que tienen, además de la falta de financiamiento.
El segundo reto es la competitividad, “cada vez hay más comercios y más productos y hay que ofrecer una mejor propuesta precio – valor para que el consumidor tenga una mejor experiencia de compra… También debemos lograr una densidad parecida a la del resto de los países… En Venezuela hay una tienda cada 44 mil 500 personas, en Colombia la hay cada 18 mil o 20 mil… eso quiere decir que hay espacio para crecer en tiendas cercanas a los consumidores”.
Por: Agencias / Foto: Cortesía