domingo, diciembre 22

Sheyla Urdaneta: «Soy una apasionada por las historias y enemiga de contar verdades a medias» (Fotos+Video)

Es una promotora del buen periodismo, de ese que defiende los derechos humanos y la democracia, y que le da voz a los que no son escuchados. Es una cazadora de historias y enemiga de la desinformación. Su palabra favorita es libertad y después de ser mamá, lo que más le gratifica es ser periodista.

Sheyla Urdaneta es una referencia en el periodismo zuliano y venezolano. Es la jefa de la Unidad de Investigación del medio digital El Pitazo, y habló con Foco Informativo en el marco de celebrarse este martes 27 de junio el Día Nacional del Periodista.

«Soy una apasionada por las historias y enemiga de contar verdades a medias. Siempre estoy pensando en una historia, en una cobertura, en algo que deba ser contado, Me gusta visibilizar a los invisibles, siempre volteando la mirada”, dijo la periodista, quien tiene 27 años en ejercicio.

 

Entre sus reconocimientos tiene dos premios Gabo y un Ortega y Gasset. Los ganó junto a un equipo de periodistas que visibilizaron lo doloroso de la migración venezolana con “Veneuela a la fuga”, los crímenes de mujeres víctimas de trata de personas con “Mujeres en la vitrina” y las duras consecuencias de la emergencia humanitaria compleja con “La generación del hambre”.

La comunicadora social puntualizó que ningún periodista debería trabajar en busca de un premio y que el mejor reconocimiento lo obtiene cuando le da cobertura a una situación y ayuda a solucionarla.

“Lo que importa es la resonancia y el impacto. Son temas muy dolorosos de hacer, pero que visibilizaron una problemática que se estaba suscitando en el país”, afirmó desde un espacio de su casa que convirtió en oficina, donde resaltan libros de reconocidos cronistas latinoamericanos, como los argentinos Leila Guerriero y Martín Caparrós.

“El periodista debe ser riguroso”

Urdaneta es adicta al café como al trabajo. Es disciplinada y amante de la rigurosidad, la cual considera clave al momento de informar.

“El periodista debe ser riguroso ante todo, para que lo que publique no pueda ser desmentido. El periodista debe siempre corroborar los datos antes de publicar. Si ven que publico algo así ‘como me llegó’ en mis redes, vengan a buscarme porque me robaron el teléfono. Esa no soy yo».

No en vano, cita al escritor colombiano Gabriel García Márquez: «no importa quién lo dice primero, sino quién lo dice mejor».

Sus días transcurren en «trabajar, trabajar y trabajar», y estar en compañía de su hija. Orgullosamente aseguró que antes que periodista es madre. Y aunque por su trabajo se perdió de varios momentos de su hija, hizo todo lo posible por acomodar su agenda y estar con ella.

«Adoro ser periodista pero antes que todo soy mamá. Anteriormente, a los dos meses uno debía volver al trabajo, yo no vi los primeros pasos de mi hija, pero le agradezco por comprender el trabajo de su madre. Cuando debía salir por trabajo estaba mi mamá que la cuidaba; pero, ahora que no está, no quiero dejarla por mucho tiempo», confesó como dice ella: «tragando grueso».

“El periodista no es juez”

Urdaneta trabajó durante 21 años en el Diario La Verdad, el cual le dio la posibilidad de conocer al fallecido escritor español Miguel Ángel Bastenier, uno de sus referentes a la hora de escribir.

El maestro la acercó a uno de sus sueños, ganar un premio Gabo. «Y mira, tengo dos», dijo con una sonrisa llena de orgullo.

Además del español, recordó a su profesora de Taller de Redacción en la Universidad del Zulia, Margarita Arribas, quien la enriqueció de sus experiencias en el ejercicio del periodismo; de allí, que afirmó la importancia de que las escuelas de Comunicación Social estén repletas de profesionales con experiencia en el diarismo.

Una de sus referentes del periodismo es su colega colombiana Gina Morelos, a quien le agradece su participación en “Venezuela a la fuga”.

También manifestó su admiración y respeto por todos los periodistas que ejercen en el país, y resaltó a Ronna Rísquez, por ser una colega aguerrida quien acaba de publicar su libro del «Tren de Aragua»; y a su jefe, el director de El Pitazo, César Batiz, por ser un profesional incansable en busca de la verdad.

A los nuevos periodistas les recomendó no ser juez y cubrir los hechos sin prejuicios en búsqueda de la verdad, a pesar que en Venezuela hay una libertad con riesgos, que -dijo- hay que ejercerla sin miedo.

«En una sociedad venezolana donde los periodistas corren riesgos, el hecho de que quieran seguir está genial. Tienen que ser respetuosos, pero contestatarios ante la censura. No publicar versiones a medias para tener regalos del periodismo, que es, citando a Gina Morelos, ‘caminar con los otros en busca de uno mismo'».

 

Por: Evelis Borjes / Fotos y video: Lizaura Noriega