En una sentencia histórica, Robert Hawkins, un hombre de Colorado, ha sido condenado a 448 años de prisión, la pena más larga jamás impuesta a un traficante de personas en Estados Unidos.
El juez Kandace Gerdes emitió la sentencia tras la condena de Hawkins por 18 cargos, incluyendo cinco de trata de personas, según un comunicado de la Oficina del Fiscal de Distrito de Denver.
Entre 2018 y 2021, Hawkins explotó a cuatro mujeres y dos niños en Denver, empleando violencia física y amenazas para mantener su control y lucrar con la venta de sus cuerpos. Incluso, disparó a un comprador de sexo que había estado con una de las víctimas, indica la nota de El Diario NY.
Una víctima describió a Hawkins como su “maestro” y dijo que las chicas que controlaba “tenían que servirle”, “haciendo cosas como prepararle comida y ganarle dinero a través de actos sexuales comerciales”, según una declaración jurada de orden de registro presentada en el caso.
“Las niñas debían ganar un mínimo de $500 dólares por día”, dice la declaración jurada. “También se les pidió que hicieran una cuota de $5,000 dólares para ganarse la confianza de Hawkins. Esta cuota tenía como objetivo ayudar a pagar una identificación y un certificado de nacimiento falsos para que las niñas pudieran viajar y realizar trabajo sexual en California”.
Remarcan la importancia de la sentencia
La fiscal de distrito de Denver, Beth McCann, expresó la importancia de esta sentencia. “Robert Hawkins no mostró consideración por nadie más que por sí mismo, aprovechándose de víctimas extremadamente vulnerables. Esta sentencia debería enviar un mensaje claro de que la trata de personas no será tolerada en Denver, y que quienes cometan estos crímenes enfrentarán consecuencias severas”, dijo McCann.
La fiscal también agradeció a los fiscales, investigadores de la Unidad de Trata de Personas de su oficina, detectives del Departamento de Policía de Denver y agentes del FBI por su colaboración en el caso.
El Jefe de Policía de Denver, Ron Thomas, destacó la importancia de la cooperación comunitaria en la lucha contra la trata de personas.
“Adoptamos un enfoque centrado en las víctimas y basado en el trauma para las investigaciones de trata de personas. Alentamos a las víctimas a que se presenten para recibir apoyo y pedimos a nuestros vecinos que informen a la policía si sospechan o conocen de estos crímenes”, declaró Thomas.
Mark Michalek, agente especial a cargo del FBI en Denver, también subrayó la importancia de la colaboración entre investigadores, especialistas en víctimas, fiscales y proveedores de servicios para víctimas en estos casos.
Por: Agencia