La serie de época ‘Se llamaba Pedro Infante’, que se estrena el próximo viernes, revive al ídolo mexicano de la pantalla y la canción en la primera producción que reproduce su vida, desde el ascenso a lo más alto de la época de oro del cine mexicano hasta su muerte en un accidente aéreo.
En una entrevista en el set de grabación, en el céntrico estado de San Luis Potosí, los protagonistas de la serie de la plataforma ViX remarcaron la importancia de traer a escena la vida íntima de Pedro Infante, reseñó EFE.
«Es la primera producción que hay sobre la vida de Pedro Infante. Estamos haciendo historia, aunque ahora lo estamos viviendo en la piel y no nos damos cuenta de lo que significa para la industria o la población que haya un producto de este nivel», dijo Mario Morán, encargado de dar vida al gran ícono de la cultura popular mexicana.
El destino quiso que el primer gran papel actoral de Morán (Puebla, 1992) sea encarnar a un personaje que, como para tantos mexicanos, tiene un significado mucho más allá de sus películas o canciones.
«Infante significa un salvavidas en mi vida muy importante», sentenció el intérprete.
«Tuve el infortunio de perder a mi madre hace meses y él me ha venido a inyectar de mucho amor para sobrellevar este proceso. Me siento identificado con él, con el amor que tenía por su madre, por su familia», confesó con la voz entrecortada.
Para la afamada actriz mexicana Ana Claudia Talancón (Cancún, 1980), quien interpreta a María Luisa León, la primera esposa de Infante, la serie ha cambiado su relación con el legado del actor.
«Antes era un señor mayor que veía los domingos en la televisión, que cantaba bonito y contaba historias conmovedoras. Hoy, después de este proyecto, significa mucho más, y no todo es bueno», subrayó.
Adentrarse en el lado más íntimo y humano de Infante, y observar su vida desde los ojos de León, contó Talancón, le permitió comprender las complejidades del personaje y conectar con él.
Julio Bracho (Ciudad de México, 1970), quien da vida al controvertido Antonio Matouk, representante de Infante, coincidió en destacar la relevancia del actor en la historia cultural mexicana.
«Es el gran ídolo mexicano, está en el inconsciente colectivo de todos. Aunque no me haya tocado por época, me acuerdo de mis abuelos viendo sus películas», expuso.
«Me da mucha nostalgia, fue una época entrañable de México, hay una magia, una inocencia», agregó.
Un personaje irrepetible
Precisamente por esa omnipresencia de Infante en la mente de los mexicanos, Morán consideró verdaderamente complejo su papel, ante las altas expectativas de la gente por que la recreación sea lo más realista posible.
«Lo más difícil es quitarte eso, lo que espera la gente, el qué van a decir, porque eso te llena de inseguridades», admitió.
No obstante, Morán buceó hasta las entrañas de su personaje, pese a que por su juventud no le correspondía tener referencias tan directas.
«El reto que enfrenté fue conocerlo tanto (…), a una persona que no tuve la referencia de ver en persona, aunque hay muchas películas, no hay mucho contenido de su vida», contó.
Uno de los métodos que empleó fue escuchar su voz y sus canciones a todas horas: desde el gimnasio hasta en reuniones con amigos.
«Todo lo que consumía era Pedro Infante, ese fue el reto más grande: poder sentir su esencia, ser espontáneo y feliz, todas esas cosas que conocemos de él. Lo importante era conocer su energía», reflexionó el actor.
«Ella hizo a Pedro Infante»
Talancón remarcó el destacado papel que León, a quien definió como una mujer “fuerte e inteligente”, tuvo en el reconocimiento cinematográfico y musical de su esposo.
“Ella diría que ella hizo a Pedro Infante. No sé qué dirá la gente, pero fue una pieza clave para que él pudiera tener el éxito que tuvo, fue una mujer que le amó intensamente. Él significó para ella todo por lo que valía la pena vivir y luchar en esta vida”, incidió la actriz.
Ver la vida de Infante desde los ojos de su esposa, explicó, otorga a la serie una mayor riqueza de perspectivas, lo que permite entender la complejidad del actor.
«La idea que se transmite del personaje es más humana», puntualizó.
La figura de Matouk, quien ha pasado a la historia como el estafador que se quedó con la fortuna de Infante, también permite una renovada mirada sobre la vida del ídolo mexicano.
«Con Matouk hay un antes y un después, para lo bueno y lo malo. Fue el potenciador de que Infante tocase tocara alturas que ni él mismo se imaginaba», subrayó Bracho.
Por Agencia