El gobernador del estado Zulia, Manuel Rosales Guerrero, lideró este jueves, 24 de octubre, el Acto de Ofrenda Floral, ante la estatua pedestre del prócer zuliano, General Rafael Urdaneta, con motivo de su ducentésimo trigésimo sexto aniversario de su natalicio.
Acompañado por autoridades civiles y miembros de su Gabinete de Gobierno, Rosales pronunció un emotivo discurso sobre la vida y obra de Urdaneta, ejemplo para las nuevas generaciones de zulianos y venezolanos. «Hoy es un día muy importante para la zulianidad, porque conmemoramos 236 años del natalicio de un gran héroe, un hijo de esta tierra: Rafael Urdaneta».
El gobernador Rosales destacó que el legado de “El Brillante” trasciende en el tiempo y se erige como el máximo referente militar de todos los tiempos en nuestra historia. «Su vida y legado son reflejos de un período tumultuoso, pero también de esperanza renovadas en la búsqueda de la paz y la libertad».
Y añadió: «Rafael Urdaneta, no solo se destacó por su acción militar, sino también por su compromiso político en momentos cruciales de la Primera República granadina, así como en la Guerra de Independencia y en la República de Colombia. Así lo reconoció El Libertador Simón Bolívar en sus cartas, donde lo elogia como un ejemplo de dedicación y heroísmo. Su valentía y su inquebrantable espíritu de lucha fueron fundamentales en la búsqueda de la independencia de nuestro país».
Recalcó que batalla tras batalla, victoria tras victoria, siempre en la causa libertadora, Urdaneta ganó sus ascensos hasta que en 1821, a sus 27 años, Bolívar lo asciende a General en Jefe y escribe, en letras de oro, las razones por las que este zuliano de honor alcanzó la gloria militar.
Recordó que Rafael Urdaneta partió muy joven a los cincuenta y seis años pero a pesar de tan corta existencia su nombre permanece incólume en la historia de las Repúblicas hermanas que libertó Bolívar. «Debe ser, porque Bolívar lo definió como el más digno por el valor y la inteligencia que distinguió su acción o porque lo catalogó como el más leal de sus leales».
Rosales argumentó que esa lealtad de Urdaneta fue tan consistente que en 1842 se puso al frente de las gestiones para traer los restos de El Libertador a Caracas, un mérito que nadie podrá quitarle a El Brillante del Zulia. «No tenemos duda en que buena parte del origen de esas virtudes tienen que ver con sus primeros estudios que transcurrieron en lo que fue el Colegio de los franciscanos situado en la actual Plaza Baralt. Es la enseñanza, el legado de San Francisco de Asís, empinados en la humildad, la honestidad y la paz como ejes de aquel sistema educativo».
Sugirió que quizás esa formación incidió en la vida del niño y adolescente Rafael Urdaneta, que con el tiempo se encumbraría a la cima de la vida republicana. «Es precisamente el elemento de la paz el que menos se menciona en ese historial de brillo y luz. Fue un General en Jefe, un líder militar, un aliado de El Libertador, a tiempo completo, y un Presidente de Colombia que pasó por el trance de informarle al mundo que Bolívar había fallecido el 17 de diciembre de 1830».
Rosales quiso poner de relieve la paz como una de las herencias que nos dejó Rafael Urdaneta a los venezolanos y en especial a los zulianos. «Amigos el Zulia es tierra de paz, siempre ha sido tierra de paz. El Zulia jamás aceptará que le impongan la cultura de la violencia. La estabilidad de nuestra gente siempre estarán primero».
Afirmó que los zulianos siempre vamos a repudiar la violencia. «Los venezolanos jamás aceptaremos la cultura de la muerte. Siempre hemos afirmado que los conflictos políticos deben solucionarse, a través de la negociación y los mínimos acuerdos de respeto al otro. Es a través del diálogo consistente, respetuoso de las ideas y de la búsqueda de soluciones como siempre hemos abordado las diferencias. Jamás coincidiremos con otros caminos».
Recalcó que nuestra historia está marcada por la resiliencia, la solidaridad y la determinación de superar adversidades. «Hoy, aquí en el Parque Urdaneta de Maracaibo proclamo, una vez más, que ante cualquier aventura ajena al respeto por la vida nos conseguirán unidos. Rafael Urdaneta nos enseñó mucho cuando prefirió una separación pacífica de la Gran Colombia, antes que un baño de sangre que aún hoy estaríamos lamentando».
Para culminar el Gobernador del estado Zulia manifestó que por eso y por mucho más reivindica al Zulia como tierra de paz que, hoy por hoy, lucha por volver a ser la región más pujante de Venezuela. «Y finalizo con una frase de Bolívar que siempre estará vigente cuando dijo: Mi querido General, algún día me iré, pero me llevaré para el final de los tiempos su conducta de estas largas luchas. Su conducta noble y juiciosa jamás serán borradas por la posteridad».
Por: Nota de Prensa / Foto: Cortesía