Hace ocho meses que Shakira anunció en sus redes sociales que se separaba de Gerard Piqué. Al principio todo parecía calmado, pero más tarde llegaron las pullas, malas caras y canciones que daban más pistas de cómo era la relación entre ambos.
La expareja se vio obligada a firmar un acuerdo de separación con la mirada puesta en el bienestar de sus hijos, aunque no fue nada fácil, puesto que el proceso ha durado siete largos meses. Ahora, Ramón Tamborero, abogado de Gerard Piqué, ha sacado a la luz las claves de esa negociación.
Uno de los aspectos que más polémica han tenido es el de la mudanza de Shakira a Miami con sus hijos. Al parecer, Piqué llegó a aceptar la decisión de la colombiana, pero con la condición de que estuviese por escrito sus visitas y los periodos establecidos para estar con él. En la actualidad la artista sigue en Barcelona, pero por los problemas de salud de su padre.
A pesar de que mucha gente pueda creer que el divorcio de Shakira y Piqué está siendo muy tormentoso, el abogado afirma que no es una «utopía» que terminen llevándose bien. Además, ha confesado que su caso cumple con las expectativas de las estadísticas de las separaciones.
Tanto el abogado de la colombiana como el del exfutbolista coinciden en que los han hecho un gran sacrificio por sus hijos. «Ambos han demostrado gran inteligencia. Han hecho un gran esfuerzo en bien de sus hijos, que no fuesen los protagonistas«, ha afirmado Tamborero en La Vanguardia.
«Ha requerido una negociación de siete meses. El acuerdo era complejo y precisó de reuniones preparatorias«, ha contado el abogado. Asimismo, a pesar de que la reunión definitiva «duró trece horas«, tan solo bastaron 15 minutos para la firma.
«Hemos firmado un acuerdo que garantiza el bienestar de nuestros hijos y que se ratificará en el juzgado, como parte de un trámite meramente formal. Nuestro único objetivo es aportarles la mayor seguridad y protección, y confiamos en que se respete su intimidad. Agradecemos el interés mostrado y esperamos que los niños puedan continuar con sus vidas con la privacidad necesaria, en un entorno seguro y tranquilo«, comunicaron los dos en noviembre.
Tras esa firma, Tamborero les dio una recomendación. «Es mejor un mal pacto que una buena sentencia. Lo repito a mis clientes: una vez ya firmado vuestro convenio de divorcio, os aconsejo meterlo en un cajón… ¡y a dialogar!«.
Por: Agencia