El psiquiatra y psicoterapeuta, Luis Madrid, aseguró que la Navidad tiene un simbolismo particular para cada familia y se celebra de manera distinta en cada una, representando, de manera formal, un recuento y balance de lo que sucedió durante el año, la reunión familiar, además de la apertura a la expresión afectiva con los familiares, amigos y compañeros, a pesar de la aflicción navideña.
«La Navidad simboliza psicológicamente, una regresión al hecho materno (…) si hay una dificultad o algo pendiente, puede generarse un cuadro de depresión navideña», añadió.
Explicó, en entrevista con Román Lozinski, que este es un mes de muchísimo trabajo para los psiquiatras porque el 40 por ciento de las personas que sufren de bipolaridad, depresión o melancolía, tienden a recaer en sus patologías en estas fechas.
Madrid indicó que hay una fuerte relación entre la depresión navideña y estar solo o tener ausencia de familiares cercanos, además es tangible el incremento de muertes por problemas cardiovasculares en estos días.
Recordó que de ocho a 15 por ciento de la población puede entrar en aflicción navideña, particularmente las personas que han tenido pérdidas recientes, rupturas o separaciones familiares, familiares exiliados, presos o que han emigrado, además de las personas con bipolaridad y ansiedad social.
«Es una época de cambio donde se cierran y se abren ciclos, es una época de transformación y solidaridad. Hay que ser empático en estas fechas con quienes no se sienten bien por alguna pérdida», señaló
El psiquiatra destacó que parte de los síntomas de esta aflicción navideña, además de las características de la depresión, son el rechazo por cualquier actividad social navideña o «efecto Grinch».
Agregó que es muy importante no aislarse en estas fechas, no consumir sustancias psicotrópicas y socializar a discreción, detalla Mundo UR.
También recomendó a las personas con familiares fuera del país, hablar con ellos unas horas antes de la celebración porque ese momento de celebración local puede ser incómodo.
Amalio Belmonte, sociólogo, señaló, en el mismo espacio, que la Navidad genera también alegría por ser una época de reencuentro, recompensas, regalos y un balance por el fin de año, enfatizando en que las costumbres tienden a desarrollarse alrededor de la esperanza y alegría.
Recalcó que diciembre es un mes armónico donde la gente cambia de carácter, aunque esto no es tan idílico por los problemas como la migración.
«Es una época no solo de carácter religioso, sino un carácter sociológico de reencuentro (…) hay instituciones que se encargan de tratar de incidir sobre los problemas del país y tratar de ser más empáticos», dijo.
Belmonte insistió en que en esta época se expresa lo mejor del ser humano.
Por: Agencias / Foto: Cortesía