El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, señaló este martes al Gobierno de Estados Unidos de supuestamente «aliarse» con la oposición de su país, a la que calificó en Twitter de «tonta».
«EEUU vino a aliarse con la oposición más tonta de la región», escribió el mandatario en un mensaje en el que criticó la portada del medio salvadoreño La Prensa Gráfica, que señala que los «reos cumplen 22 meses sin visitas» y que no hace referencia a Estados Unidos.
En el texto interior, el medio cita a representantes de la organización humanitaria Azul Originario (AZO) y a familiares de reos.
«¿No son ellos los que dicen que hay una tregua con beneficios carcelarios? ¿No dice el Gobierno de EEUU que hasta prostitutas se permiten en las cárceles? ¿Ahora resulta que llevamos 22 meses tratándolos mal?», reza la publicación en la referida red social.
Esta no es la primera vez que el mandatario vincula a Estados Unidos con la oposición salvadoreña, dado que a inicios de noviembre sostuvo que ese país financia a organizaciones sociales que a su juicio son la «oposición política».
«¿Qué diría el Gobierno de los Estados Unidos si nosotros financiáramos a su oposición política? Porque eso es lo que hacen esas ONG, y eso todo el mundo lo sabe», publicó el mandatario en su Twitter.
El presidente salvadoreño acompañó su mensaje de una publicación del medio local Diario El Mundo en la que se informa que la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) destinará 300 millones de dólares a organizaciones en El Salvador, Guatemala y Honduras.
Estados Unidos sancionó, a inicios de diciembre, a tres funcionarios del Gobierno salvadoreño bajo acusaciones de corrupción y de negociar con las pandillas.
Se trata del jefe de las prisiones, Osiris Luna; el titular de la Dirección de Reconstrucción de Tejido Social, Carlos Marroquín, y la jefa del Gabinete del Gobierno, Carolina Recinos.
El Departamento del Tesoro de EEUU señaló en un comunicado que Luna y Marroquín, «dirigieron, facilitaron y organizaron varios encuentros secretos con la participación de líderes de pandillas encarcelados».
«Estos encuentros formaron parte de esfuerzos del Gobierno de El Salvador para negociar una tregua secreta con líderes de pandillas», apunta el documento.
En el caso de Recinos, el Tesoro estadounidense la acusa de haber liderado una supuesta trama de corrupción multimillonaria en compras «sospechosas» para la construcción de un hospital y de supuestamente ordenar a varios ministros autorizar comprar irregulares.
El 9 de noviembre, el mandatario salvadoreño publicó: «Está claro que el Gobierno de Estados Unidos no acepta colaboración, amistad o alianza. Es sometimiento absoluto, o nada».
Por: Agencia