Agentes del Departamento de Policía del condado de Fairfax (Virginia, EEUU) fueron acusados de encubrir una red de trata de personas a cambio de tener relaciones sexuales gratis con las mujeres que eran traficadas, recoge AP.
La demanda, presentada en nombre de una mujer costarricense identificada en el documento con el nombre de Jane Doe, también nombra al exjefe de la policía del condado, Ed Roessler, asegurando que ayudó a encubrir a los agentes cuando el trabajo de otro detective amenazó con exponer sus fechorías.
“Los funcionarios de la Policía se burlaban regularmente de la idea de que las mujeres traficadas eran víctimas, insistiendo en cambio en que eran simplemente prostitutas que participaban voluntariamente en una actividad comercial ilegal”, sostiene la demanda.
La mujer costarricense fue reclutada en su país natal para viajar a Estados Unidos para trabajar como acompañante, lo que implicaba salir con hombres adinerados, pero también prostitución. Cuando llegó al destino a finales de 2010, la mujer que dirigía la red de trata, Hazel Sánchez Cerdas, le quitó el pasaporte y la obligó a tener relaciones sexuales a cambio de dinero. Asimismo, la amenazó con hacer daño a su familia si intentaba escapar.
En 2019, gracias a las declaraciones de la mujer, el Buró Federal de Investigaciones? (FBI, por sus siglas en inglés) logró detener a Sánchez, que se declaró culpable de cargos relacionados con el tráfico sexual y fue condenada a dos años y medio de prisión.
La demanda también incluye el testimonio de un exdetective de Fairfax, William Woolf, que asegura que fue amenazado por oficiales de alto rango después de intentar investigar la red de trata.
Victor Glasberg, el abogado que presentó originalmente la demanda a nombre de la mujer en octubre, recientemente incluía en el procedimiento las identidades de los agentes implicados. Se informó que ninguno de los oficiales acusados sigue siendo miembro de la Policía.
Por Agencia