Los restos óseos de 34 víctimas fallecidas durante el conflicto armado en Perú (1980-2000) fueron entregados este jueves a sus familias por parte del Ministerio Público en una ceremonia celebrada en la catedral de Ayacucho, la región más afectada por la violencia de esos 20 años.
«El Ministerio Público, a través de la Fiscalía Especializada en Derechos Humanos, Interculturalidad y Delitos de Terrorismo de Ayacucho, realiza la ceremonia de entrega de restos óseos de 34 víctimas del periodo de violencia generada por el terrorismo entre 1980 y 2000«, informó la institución en redes sociales.
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El #MinisterioPúblico, a través de la Fiscalía Especializada en Derechos Humanos, Interculturalidad y Delitos de Terrorismo de Ayacucho, realiza la ceremonia de entrega de restos óseos de 34 víctimas del periodo de violencia generada por el terrorismo entre 1980 y 2000. pic.twitter.com/psljDZQaS7— Ministerio Público (@FiscaliaPeru) December 1, 2022
Los restos, depositados en pequeños féretros blancos y con arreglos florales, fueron entregados en una ceremonia en la catedral barroca de Ayacucho a la que asistieron los familiares de las víctimas, además de autoridades.
La Fiscalía añadió en sus redes que la identificación de los restos ha sido posible gracias al trabajo de forenses y biólogos del Ministerio Público.
El fiscal superior coordinador de la Fiscalía Superior, Luis Enrique Valdivia, explicó en Canal N que los restos de estas víctimas fueron hallados en diversos puntos del departamento central de Ayacucho en casos que han tenido un tiempo largo de investigación y que ahora concluye con la entrega a los familiares.
La representante de los familiares, Ana Magnolia Quispe, recordó al mismo medio cómo una noche cuando tenía ocho años despertó y vio a familiares fallecidos, y se mostró agradecida al Ministerio Público y de Justicia por el apoyo recibido durante el proceso de identificación de las personas desaparecidas hace tres décadas.
«Ahora van a tener una sepultura digna«, indicó Quispe, quien añadió entre lágrimas que llevarían a la localidad ayacuchana de Tambo los restos de sus familiares.
Además de la Fiscalía y familiares, también estuvo presente una representación del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) para Perú, Bolivia y Ecuador.
«El reto es aún grande, quedan miles de personas desaparecidas en Perú y miles de familias esperan respuesta, pero con esfuerzo conjunto de todos los involucrados se podrá brindar alivio a los familiares«, dijo la jefa de Delegación del CICR para Perú, Bolivia y Ecuador, Linh Schroeder.
El conflicto armado desatado por los grupos terroristas Sendero Luminoso y Movimiento Revolucionario Túpac Amaru (MRTA) dejó 69.000 muertos entre 1980 y 2000, la mayoría a manos de Sendero Luminoso, según el informe final de la Comisión de la Verdad y la Reconciliación (CVR).
Por: Agencia