La tasa de inflación mensual en septiembre de 2024 se situó en 3,4 por ciento y la anualizada en 46 por ciento, lo que denotó una aceleración del aumento de los precios respecto agosto. La tasa acumulada alcanzó a 30,4 por ciento, según la entidad de análisis independiente Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF).
Con estos datos, el OVF cuenta una historia muy diferente a la que reportó el Banco Central de Venezuela (BCV), cuyas cifras oficiales indican un aumento del Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de 0,8 por ciento en septiembre, detalla Banca y Negocios.
La estimación del OVF cuadruplica la variación intermensual de la inflación del BCV.
Cuando se miran los datos de inflación acumulada e interanual, la historia es la misma. En nueve meses la inflación subió 12,1 por ciento, según el BCV, mientras que el reporte del OVF establece una variación de más del doble, al tiempo que el incremento relativo anualizado del observatorio es 78,64 por ciento más elevado que el registrado por el ente emisor.
Desde el punto de vista macroeconómico, estos resultados están en correspondencia con la depreciación del bolívar en el mercado paralelo de tres por ciento y con la expansión de la liquidez monetaria de 4,7 por ciento, ambas en septiembre en relación con agosto, indica el OVF.
En una economía altamente dolarizada como la venezolana, el ajuste del tipo de cambio del bolívar respecto al dólar usualmente se traspasa de forma casi lineal a los precios, tomando en cuenta que la tasa de cambio del dólar en el mercado paralelo es la variable más importante para la formación de los precios, no la tasa oficial.
Por rubros
En términos de rubros, los que reflejaron los mayores aumentos fueron educación con seis por ciento -una coincidencia con la data del BCV-, alimentos con 5,1por ciento, servicios con un alza de 4,5 por ciento y esparcimiento con 4,1 por ciento.
En lo relativo a educación, los incrementos más significativos estuvieron en la mensualidad de los colegios 14,1 por ciento, matrícula de universidades 6,2 por ciento y los textos de educación básica 2,9 por ciento.
Por su parte, en el alza de los precios de los alimentos influyó los aumentos del pan 16,3 por ciento, el pescado 6,8 por ciento, bebidas lácteas 13,1 por ciento, caraotas negras 14,4 por ciento y frutas 14,3 por ciento, entre otros bienes.
A nivel de servicios, el aseo urbano se incrementó cuatro por ciento y la televisión por cable tres por ciento, en tanto que los precios de la electricidad y la telefonía se mantuvieron estables.
Desde el punto de vista regional, los precios subieron más en Nueva Esparta con 4,6 por ciento; Zulia con un alza de 3,4 por ciento; Distrito Capital con 3,2 por ciento y Anzoátegui con un aumento de 3,1 por ciento.
Finalmente, es un hecho que el anclaje del tipo de cambio oficial y la menor depreciación del bolívar en el mercado paralelo han contribuido a la desaceleración de la inflación.
No obstante, conviene advertir que ese anclaje cambiario es altamente riesgoso cuando la inflación tarda en converger con la tasa internacional, al restar competitividad a los bienes producidos localmente, en un entorno de altos impuestos, deficiencias en la infraestructura y los servicios públicos junto con otros costos que encarecen la producción nacional.
Por: Agencias / Foto: Cortesía