martes, noviembre 5

OPEP+ decide sobre cuota de bombeo ante incertidumbre en mercados

Los 23 países productores de petróleo que forman la alianza OPEP+ afrontan mañana lunes la decisión de si recortar su producción para octubre, para frenar la depreciación del crudo, o mantenerla ante la incertidumbre en la que se mezclan el miedo a una caída de la demanda con los problemas de suministro.

La reunión virtual de los ministros de Energía de los 13 miembros de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), liderados por Arabia Saudí, y de sus diez aliados, entre ellos Rusia, se produce en una encrucijada de factores, reseñó EFE.

El precio del petróleo ha caído más de un 20 % desde los picos de 120 dólares que alcanzó el pasado junio, debido a los temores de que una recesión económica afecte duramente a la demanda.

La elevada inflación, azuzada por el encarecimiento de la energía debido a la invasión rusa de Ucrania, y las dudas sobre cómo podrían impactar nuevas oleadas de la covid en la economía china, han creado dudas sobre el crecimiento económico mundial.

Aunque la sensación general es que la OPEP+ no tocará mañana su producción, la mera posibilidad de que evalúe esa opción provocó que tanto el barril Brent, de referencia en Europa, como el Texas estadounidense cerraran el viernes al alza, tras tres días de caídas, situándose en 93 y 86,7 dólares respectivamente.

Pese a esas subidas, el Brent acumuló una pérdida semanal del 7 %, y el Texas del 5  %.

Hace dos semanas, el ministro de Energía de Arabia Saudí, el príncipe Abdulaziz bin Salman, insinuó que la OPEP podría reaccionar con un recorte del bombeo

Pero también la oferta, y no sólo la demanda, puede influir en la decisión.

El comité técnico que asesora a la OPEP+ revisó esta semana sus cálculos y concluyó que en 2022 la oferta superará a la demanda en 400.000 barriles diarios (bd), la mitad de lo estimado previamente.

Para 2023, se espera incluso un déficit de 300.000 bd.

Lo cierto es que la alianza petrolera lleva tiempo teniendo problemas para cumplir con sus cuotas de producción y, según varias fuentes, los dos últimos meses su bombeo conjunto estuvo casi 3 millones de barriles por debajo de sus objetivos de producción.

La OPEP+ ha estado meses aplicando estrictamente un gradual aumento del bombeo que pretendía recuperar este septiembre la producción que había antes de que la pandemia de la covid, y el consiguiente parón económico, forzara a un rotundo recorte.

La dificultad para abrir mucho y rápido los grifos quedó patente el pasado 3 de agosto, cuando la OPEP+ anunció que sólo añadiría 100.000 barriles extras al mercado.

De hecho, los expertos creen que sólo Arabia Saudí y los Emiratos Árabes Unidos cuentan aún con margen para aumentar el bombeo, mientras el resto extrae ya al máximo de sus posibilidades.

De momento, parece retrasarse la posibilidad de un acuerdo sobre el programa atómico iraní que permitiría levantar sanciones y poner en el mercado un millón de barriles al día.

Los conflictos que sufren Irak o Libia amenaza también con reducir aún más sus bombeos. Y Rusia, que el año pasado fue el segundo mayor productor, tras EEUU., ha reducido notablemente sus extracciones por las sanciones de Occidente por su ataque a Ucrania.

El G7, que agrupa a las siete mayores economías occidentales, acordó el viernes intentar reunir el apoyo de otros países para poner un tope al precio del crudo ruso, y reducir así los ingresos que Moscú puede usar para continuar su agresión militar a Ucrania.

El Gobierno ruso ha amenazado con suspender el suministro de crudo y productos derivados a Occidente si se limitan los precios.

Tras conocerse la decisión del G7, la gasística estatal rusa Gazprom anunció el corte completo de suministro a través del gasoducto Nord Stream, argumentando un problema técnico, con lo que se añade más presión aún al mercado energético en Europa.

 

Por Agencia