Altos funcionarios de los departamentos de Estado y del Tesoro de EE UU discuten propuestas para un fondo que podría liberar más de tres mil millones de dólares para brindar ayuda humanitaria a los venezolanos a través de las Naciones Unidas, según nueve personas cercanas a las conversaciones.
Las propuestas ofrecen una forma potencial de revivir el estancado diálogo político en Venezuela, y surgen a medida que más venezolanos intentan llegar a su país, lo que crea enfrentamientos entre los políticos estadounidenses por la inmigración.
Los migrantes que llegan a la frontera entre Estados Unidos y México impulsan a la administración del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, a pedir que se descongelen los fondos venezolanos retenidos en bancos extranjeros que proporcionarían los alimentos y medicamentos necesarios, indicaron las fuentes a Reuters.
Según la Encuesta Nacional de Condiciones de Vida (ENCOVI), realizada por universidades venezolanas, el 94 por ciento de los venezolanos vivía el año pasado en situación de pobreza, mientras que más de la mitad experimentaba inseguridad alimentaria moderada a severa.
Algunos analistas y grupos de derechos han dicho que las sanciones estadounidenses y occidentales han exacerbado la profunda crisis económica del país.
En 2019, Estados Unidos bajo el expresidente Donald Trump y otros países occidentales impusieron sanciones a Venezuela para impedir que el gobierno del presidente Nicolás Maduro acceda a los ingresos del petróleo, congelando miles de millones de dólares en cuentas del gobierno de Venezuela en el extranjero.
Washington y algunos aliados europeos ven la medida de liberar los fondos como esencial para asegurar un «acuerdo social» entre el gobierno de Venezuela y su oposición política, indicaron las fuentes.
Los departamentos de Estado y del Tesoro de EEUU y el Ministerio de Información de Venezuela no respondieron de inmediato a las solicitudes de comentarios.
Naciones Unidas instan a Venezuela y la oposición a participar en «un diálogo inclusivo y significativo que conduzca a soluciones negociadas, con los derechos humanos como componente central», destacó el portavoz Stephane Dujarric. No comentó si la ONU aceptó gestionar un programa de ayuda.
«La movilización de recursos sigue siendo un desafío clave», señaló, y agregó que los planes para la ayuda 2022-2023 están financiados en un 16,5 por ciento y que la ONU está pidiendo apoyo.
Caza por dinero
Nicolás Maduro propuso por primera vez un fondo administrado por la ONU en 2020, cuando pidió un «instrumento internacional jurídicamente vinculante sobre el desarrollo» para superar la pobreza y la desigualdad. Más tarde, intentó sin éxito liberar fondos en todo el mundo.
Los llamados de Maduro no generaron acción en medio de la estrategia de «máxima presión» de Trump para derrocarlo.
Washington proporcionó mil 940 millones de dólares en ayuda humanitaria a Venezuela y a las naciones que albergan a venezolanos desde 2017, pero el dinero hizo poco para frenar la migración con más de seis millones de venezolanos que huyen del país.
El nuevo fondo podría enfrentar la oposición de algunos partidarios de la línea dura en el Congreso de los EEUU que apoyan la presión continua sobre Maduro. También tiene a algunos partidos de la oposición de Venezuela preocupados por el impacto político de la liberación de fondos por los que el mandatario venezolano podría atribuirse el crédito antes de una posible elección presidencial de 2024.
El Departamento de Seguridad Nacional ahora solo permite la entrada desde Venezuela o un tercer país para los solicitantes con familiares que viven legalmente en los Estados Unidos.
Los funcionarios estadounidenses argumentaron que el fondo de ayuda podría evitar que los venezolanos huyan al mejorar las condiciones de vida a través de un mejor acceso a alimentos, medicinas y atención médica, y al financiar proyectos de infraestructura para reparar la inestable red eléctrica de Venezuela, detallaron las fuentes.
Naciones Unidas redactó una primera propuesta para supervisar el fondo a mediados de octubre, destacaron las fuentes a Reuters. Desde entonces, funcionarios estadounidenses y líderes de la oposición recurrieron a bancos de desarrollo internacionales, grupos de expertos y expertos para estudiar propuestas.
La fecha de lanzamiento y muchos detalles siguen siendo inciertos. Pero el fondo podría divulgarse públicamente una vez que los enviados de Maduro y la oposición se sienten en México para discutir las elecciones presidenciales, dijeron dos de las personas.
Los enviados de la oposición discutieron el paquete de ayuda con funcionarios estadounidenses durante sus reuniones la semana pasada en Washington, afirmaron cuatro de las fuentes. Los funcionarios estadounidenses también se acercaron al gobierno de Maduro para discutir el tema, según otros dos.
La posibilidad de que el dinero venezolano fluya nuevamente para importaciones e inversiones está llamando la atención de los acreedores y tenedores de deuda venezolana.
Entre los acreedores de Venezuela se encuentran organizaciones, incluido el Banco Interamericano de Desarrollo y el Banco de Desarrollo de América Latina, que ayudaron a manejar fondos o contribuyeron a proyectos clave de ayuda en otras naciones. Hay miles de millones de dólares en préstamos y líneas de crédito que no se pagó.
Para las Naciones Unidas, podría convertirse en uno de los fondos más grandes jamás manejados, aunque no está claro el monto total que podría liberarse legalmente.
Por: Agencias / Foto: Cortesía