El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, afirmó que la situación «sanitaria y humanitaria» en la Franja de Gaza es «inhumana» tras más de cuatro meses ofensiva militar de Israel, desencadenada por el ataque del grupo terrorista Hamás contra territorio israelí, señaló EFE.
«¿En qué mundo vivimos cuando la gente no puede conseguir comida y agua, o cuando personas que no pueden ni siquiera caminar no reciben atención?», preguntó Tedros en una conferencia de prensa en Ginebra. «¿En qué mundo vivimos cuando el personal de salud se arriesga a ser bombardeado cuando trabaja o cuando los hospitales tienen que cerrar porque no hay electricidad ni medicinas (…) o porque se convierten en objetivos militares?», añadió, según reseña de Contrapunto.
«La situación sanitaria y humanitaria en Gaza es inhumana y sigue deteriorándose. Gaza se convirtió en una zona de muerte», aseguró el jefe de la OMS. «Una gran parte del territorio fue destruida, más de 29.000 personas han muerto, otras están desaparecidas, presumiblemente muertas y muchos, muchos otros están heridos», agregó Tedros.
Prohibido atacar hospitales
Tedros también reveló que los niveles de desnutrición severa han aumentado de manera espectacular en Gaza desde el inicio del conflicto, pasando del 1 por ciento a más del 15 por ciento. Advirtió que la situación solo puede empeorar dado que la violencia no cesa. «¡Necesitamos un cese del fuego ahora! Los rehenes deben ser liberados, las bombas deben cesar de caer y el acceso a la ayuda humanitaria debe ser libre», puntualizó.
El principal asesor jurídico de la OMS, Steve Salomon, aclaró que, en cumplimiento del derecho humanitario internacional, no hay justificación alguna para atacar las infraestructuras o al personal médico, ni siquiera que puedan haber sido utilizadas con fines militares, como se intenta justificar desde Israel. Detalló que incluso cuando alguna instalación sanitaria se utiliza militarmente, «los ataques desproporcionados están estrictamente prohibidos».
Enseguida aclaró que tanto atacar como militarizar instalaciones médicas (como habría hecho Hamás con algunas de ellas) está absolutamente prohibido. Según la ONU, 2,2 millones de personas, o sea la inmensa mayoría de la población de Gaza, están amenazadas por el hambre en la Franja de Gaza.
Por Agencia.