El economista y socio-director de Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, advierte que el país tiene una necesidad creciente de créditos no satisfecha, informando que la cartera de créditos venezolana es de 2300 millones, es decir, casi 2,5 puntos de PIB, cuando en América Latina está en torno a 40 por ciento.
Resalta, en entrevista con Román Lozinski, que al reducir el encaje y llegar a un 10 o 15 por ciento, esa cartera pasaría de 2,5 puntos de PIB a más de 4 puntos de PIB, sin embargo, insiste en que el encaje pesa, pero no es el único factor que influye.
«Los otros factores serían, la crisis en Venezuela donde perdimos el 80 por ciento de nuestro tamaño y eso arrastró a la banca, haciendo que su caída sea mayor que la contracción de la economía», añade.
Oliveros destacó que Venezuela tiene un problema estructural del crédito, señalando que pasar de 2,5 puntos de PIB a más de 4 puntos de PIB, es un avance, pero falta mucho más.
También explica que no es solo cambiar el encaje legal, sino modificar el marco regulatorio y replantear la banca en una economía que es multimoneda.
Tras la llegada del mandatario venezolano a los BRICS, asegura que la principal utilidad que busca Venezuela ahí, es entrar en un bloque que salga del “stablishment global comercial”.
El economista indica que, en un artículo del portal The Economist, se dice que Putin busca, a través de los BRICS, crear una estructura económica financiera que no dependa del dólar ya que las sanciones los sacan del sistema global de pago que se hace en dólares.
Agrega que en la medida en que se sumen más países con seriedad a los BRICS, se avanza en crear nuevas redes de comercio e intercambios comerciales en otras monedas.
«Las relaciones internacionales, no son solo eso, también son relaciones geopolíticas y más después de la pandemia donde se dieron cuenta que las cadenas de suministro se pueden alterar de un momento a otro y que puede haber escasez muy rápido», acota.
Por: Agencias / Foto: Cortesía