El Nuncio Apostólico en Venezuela, monseñor Alberto Ortega Martín, recibió este lunes la orden San Alberto Hurtado, la cual le conferida por parte de la Universidad Católica Cecilio Acosta (UNICA), de manos de sus autoridades y de la Iglesia en el estado Zulia.
Ortega Martín presidirá, la tarde de este 18 de noviembre, la Solemne Eucaristía de Nuestra Señora del Rosario de Chiquinquirá, en ocasión de los 315 años del Milagro de Renovación Mariana en Maracaibo, advocación que no es extraña para él, pues tuvo contacto con ella durante su misión diplomática en Chile.
“En Chile hay una presencia muy fuerte de venezolanos. Se calcula que más medio millón. (…) Chile es un país bastante secularizado, me sorprendió siendo América Latina, aunque hay templos preciosos, pero con algunas parroquias donde no había mucha vitalidad. La llegada de los venezolanos con una fe muy viva, con un amor muy grande a la Virgen ha revitalizado, ha dado como una nueva vida a muchas parroquias”, explicó el representante del Vaticano en Venezuela.
Para el clérigo de origen español, la llegada de los venezolanos constituyó una bendición.
“Allí percibí en concreto un gran amor a la Virgen y un gran amor, también, al beato José Gregorio Hernández. La beatificación y enseguida en varias parroquias pidieron reliquias y su acogida fue una gran fiesta y allí conocí por su gran devoción a este gran beato, que esperemos pues como santo”, contó el sacerdote.
Durante su discurso recordó que el papa Francisco tiene la iniciativa del pacto educativo global, la cual no solo esa apoyada por instituciones católicas, sino por la no católicas también, pues en su opinión es algo que interesa a todos.
“Ese pacto educativo tiene como el centro el bien de la persona, la equidad. (…) Creo que en el ámbito educativo hay un montón de colaboración con todas las instituciones porque buscamos el bien común, tenemos intereses comunes, mucho que hacer y es bonito hacerlo juntos, coordinados, ayudarnos unos a otros en esta labor tan decisiva”, apuntó.
En el acto de reconocimiento participaron también monseñor José Luis Azuaje, arzobispo de Maracaibo; Eduardo Ortigoza, rector la casa de estudios superiores, y Nedward Andrade, párroco de la Basílica Santuario Mariano.
Por: José Manuel Sánchez / Fotos: Lizaura Noriega