Un verdadero milagro fue lo que ocurrió con los cuatro niños que se encontraban desaparecidos después de que la avioneta en la que viajaban se accidentara.
Los niños lograron sobrevivir gracias a los cuidados y conocimientos de la selva de la menor de 13 años, quien es la mayor del grupo y logró orientarlos. Así lo confirmó el presidente Gustavo Petro, reseñó Semana.
La niña cuidó a los demás menores, de 9, 4 y 1 año, quienes son sus hermanos.
Los menores viajaban junto con tres adultos en la avioneta tipo C206 de matrícula HK 2803, que desapareció el día primero de mayo en la selva del Caquetá.
Los cuerpos de los adultos fueron encontrados sin vida, pero los cuatro menores permanecieron desaparecidos en la espesura de la selva y solo la pericia y el conocimiento de la zona les permitió sobrevivir.
Las víctimas de este accidente son Hernando Murcia Morales, quien es el piloto de la compañía Avianline Charter’s, que alcanzó a reportar fallas en el motor y se declaró en emergencia ante la torre de control; Magdalena Mucutuy Valencia, de 33 años, quien es la madre de los cuatro niños que lograron sobrevivir, y Herman Mendoza Hernández, quien era el director de la fundación de profesionales indígenas Yetara.
Entre los rastros que los niños dejaron a su paso por el recorrido al interior de este sitio se hallaron unas tijeras y una moña con su respectivo empaque. Adicionalmente, en la zona boscosa de la vereda Palma Rosa del municipio de Solano, en el departamento de Caquetá, donde fue encontrada la aeronave por los integrantes de las Fuerzas Militares, encontraron rastros de alimentos y cambuches que fueron dejados por los menores.
Otros elementos encontrados en la zona por los comandos de las fuerzas especiales fueron un bolso abierto, cosméticos, calzado, entre otras cosas que al parecer fueron utilizados por la niña de 13 años y sus hermanos para sobrevivir en medio de lo oscuro y húmedo de la zona donde se encontraban.
La pericia de la niña de 13 años le permitió encontrar en medio de la selva todo lo que necesitaba para mantenerse con vida y proteger a sus hermanos. La menor encontró todo necesarios y logró organizar a los demás para incluso construir un cambuche que los protegía del agua, para descansar y les daba algo de seguridad tanto de día como de noche.
De acuerdo con lo encontrado por los militares en la zona, este lugar fue construido con hojas y palos. Además, otras de las pistas encontradas fueron frutas con mordeduras recientes, un tetero, tijeras e incluso moñitas con las cuales la niña de 13 años y sus hermanos ataron las hojas para ayudar a sostener el cambuche.
A esto se suma que la menor, quien se convirtió en la líder del grupo, abrió las maletas y sacó de ellas algunas pertenencias que utilizaron cada día que lograron sobrevivir. En total permanecieron en la selva por 40 días.
Lo encontrado por los militares y los rastros dejados por los niños confirman que estuvieron caminando buscando la forma de salir de la selva aprovechando los conocimientos de la zona por ser indígenas, y a su vez dejaron pistas que permitieron encontrarlos.
La niña pudo identificar no solo los elementos para construir el cambuche, sino además los elementos que la selva producía y que le servían a ella y a sus hermanos para alimentarse, consumir líquido y darle al organismo los nutrientes necesarios para seguir con vida.
Los menores se encuentran en buen estado de salud con algunos síntomas de deshidratación y picaduras de insectos propios de la zona.
Por Agencia