Una parte de la carga de los 1,4 millones de litros de fuelóleo industrial empezó a esparcirse, dijeron el sábado los guardacostas, que intentan evitar una catástrofe ecológica. Si la carga completa del barco escapa sería el peor derrame de petróleo en la historia de Filipinas.
Submarinistas que inspeccionaban el casco del navío «MT Terra Nova» constataron un «escape mínimo» a nivel de las válvulas, precisó el portavoz de la guardia costera filipina, Armando Balilo. Pero la situación «no es alarmante«, añadió. Se trata «sólo de un pequeño volumen«, quiso tranquilizar el vocero, insistiendo en que «los depósitos están intactos«. «Mañana esperamos poder trasvasar el petróleo«, agregó, expone la nota de AFP.
La guardia costera había indicado horas antes que el combustible que usaba el buque para propulsarse se había derramado, pero que las cisternas seguían intactas. La mancha de petróleo que se ha formado mide entre 12 y 14 kilómetros y se expande por la bahía, de la que miles de pescadores y turoperadores dependen para su trabajo.
Evitar lo peor
La guardia costera había advertido que si la carga completa del barco escapaba sería «una catástrofe ambiental» y el peor derrame de petróleo en la historia de Filipinas.
El petrolero se hundió a apenas siete kilómetros de su puerto de amarre en Limay, al oeste de Manila, adonde intentaba volver ante el mal tiempo que se encontró en la ruta.
El incidente ocurrió en medio de fuertes lluvias agravadas por el paso cercano del tifón Gaemi, que inundaron las calles de Manila y de las regiones aledañas. Los servicios meteorológicos dijeron que las precipitaciones se habían debilitado ya el viernes, lo que da a las autoridades unos días de relativa calma para recuperar la carga del barco.
Según la guardia costera, el proceso de extracción durará al menos siete días.
Por: Agencia