martes, noviembre 5

Ministro del Interior de Libia sobrevive a emboscada

El ministro del Interior del gobierno de Libia respaldado por la ONU sobrevivió a una emboscada el domingo, ataque que deja ver los enormes desafíos para el gobierno recién nombrado en sus intentos por unir a la nación antes de los comicios de este año.

Hombres armados le dispararon a la caravana del ministro Fathi Bashagha en una carretera de Trípoli, hiriendo al menos a uno de sus guardias, informó Amin al-Hashmi, portavoz del Ministerio de Salud.

El ministro sobrevivió al ataque y sus guardias persiguieron a los agresores, matando a uno y arrestando a otros dos, agregó.

Bashagha regresaba a su residencia en el vecindario Janzur cuando hombres armados en un vehículo blindado le dispararon a su caravana, indicó el Ministerio del Interior en un comunicado.

El ataque fue un “intento para asesinar” al ministro, añadió.

Horas antes, Bashagha se reunió con Mustafá Sanalla, director de la Corporación Nacional de Petróleo de Libia, para conversar sobre la seguridad en las instalaciones petroleras y cómo fortalecer la independencia de la empresa para “garantizar una distribución justa de la riqueza entre todos los libios”. El ministro publicó una fotografía de ambos en Twitter y dijo que la reunión había sido “fructífera”.

El embajador de Estados Unidos en Libia, Richard Norland, también condenó el ataque y pidió que se abra una investigación para hacer que los responsables rindan cuentas.

“El énfasis del ministro Bashagha en poner fin a la influencia de las milicias rebeldes tiene todo nuestro apoyo”, señaló Norland.

El enviado especial de la ONU a Libia, Jan Kubis, también pidió “una investigación completa, rápida y transparente” sobre el incidente, diciendo que pretendía “descarrilar el proceso político y otras labores en apoyo a Libia y su pueblo”.

Señaló que el ataque también ha mostrado “cuán importante es mantener todas las armas únicamente en las manos de las autoridades legítimas”.

Libia, un país rico en petróleo, se vio sumido en el caos después de un alzamiento popular en 2011 que derrocó y derivó en la muerte del dictador Moamar Gadhafi. El país ha estado dividido entre dos gobiernos, uno en el este y otro en el oeste, cada uno respaldado por una amplia variedad de milicias, así como de potencias extranjeras.

Este mes, un organismo formado por la ONU y compuesto por libios de ambos bandos nombró un gobierno interino — un Consejo Presidencial de tres miembros y un primer ministro — para que conduzca al país hasta las elecciones, programadas para el 24 de diciembre.

AP