En una mesa repleta de luminarias, el brillo de Miguel Cabrera era particular. Las 11 estrellas que estaban sentadas a su alrededor en la sala de prensa del Estadio Monumental Simón Bolívar de Caracas estaban allí para él, en un intento de agradecerle todo lo que el maracayero hizo por ellos y por el beisbol venezolano en su excelsa carrera, que promete terminar en Cooperstown.
Pero antes de pensar en la inmortalidad, Cabrera tiene otros planes por completar. Uno de ellos decidió revelarlo en medio de la charla con la prensa presente y se apoderó del protagonismo en la jornada de forma inmediata.
Su encuentro del pasado 1° de octubre en el Comerica Park podría no ser el último de su trayectoria profesional. El privilegio de albergar semejante compromiso puede recaer en uno de los recintos de la Liga Venezolana de Béisbol Profesional, en la próxima campaña.
“Estuve pensando durante un tiempo la posibilidad de retirarme en Venezuela”, confesó el dos veces ganador del premio MVP, antes de la celebración de la vigésimo primera edición del Festival de Jonrones. “Lo conversé con mi familia, con mis personas cercanas. Pero al final mi cuerpo no me permitió poder hacerlo este año, mi rodilla todavía me está generando problemas y voy a ser completamente sincero, no me gusta dar pena”, agregó.
Sin embargo, la posibilidad de darle tiempo a su cuerpo para recuperarse y mantenerse entrenando en el transcurso de los meses venideros con la intención de un último intento, una aventura final con los bengalíes que lo vieron crecer y convertirse en una de las máximas figuras de la pelota de MLB, continúa sobre la mesa.
“Si voy a hacer esto, quiero tener la oportunidad de realmente competir con todos estos chamos. Me gusta hacer las cosas bien y creo que los fanáticos se merecen mi mejor versión”, contó. “Poder vestir el uniforme de los Tigres una última vez y despedirme frente a la gente en Maracay sería muy especial. Vamos a evaluarlo. Tengo pensado visitar el José Pérez Colmenares, reunirme con el presidente (de Aragua, Víctor Zambrano) y ver qué piensa sobre mi planteamiento”.
Jackson Chourio, un futuro promisorio
El foco pasó de un pelotero que recién culminó su carrera en MLB, a uno que todavía no la empieza, pero que tiene previsto establecerse como uno de los pilares criollos en el máximo escenario en la próxima década.
Jackson Chourio, fresco de firmar una extensión de contrato récord con los Cerveceros de Milwaukee por 10 años y 80 millones de dólares, que lo convirtió en el jugador con el pacto más jugoso en la historia antes de estrenarse en las Mayores, fue el novato de la camada.
“Estoy muy orgulloso de que esta organización haya confiado en mí lo suficiente para darme un contrato de esa magnitud”, dijo Chourio sobre los lupulosos. “El compromiso ahora aumenta, el enfoque es más grande. Llegar a las Grandes Ligas es un sueño y sé que soy privilegiado de recibir esta oportunidad”.
Francisco Álvarez con grandes expectativas
Francisco Álvarez, quien a pesar de tener más de 100 juegos de experiencia en la Gran Carpa se mantiene como una de las grandes promesas de los Mets, podría ser el siguiente joven pelotero venezolano en firmar una extensión importante.
El mirandino no confirmó alguna conversación al respecto, pero sí señaló que el alto mando de Nueva York le hizo una pregunta muy particular.
“Me preguntaron si me gustaba Nueva York y yo dije que sí”, expresó. “Pero ellos lo tomaron como si yo había dicho que quería un contrato a largo plazo. Sólo quise decir que me gusta la ciudad y ya”.
Eugenio Suárez se alista para una nueva etapa
Eugenio Suárez, quien en días recientes fue adquirido por los Cascabeles de Arizona, el más reciente monarca de la Liga Nacional, se mostró agradecido por recibir el interés de las serpientes, que ahora le brindan la oportunidad de un segundo aire y quizás un renacer.
“Estoy agradecido con cada chance en mi carrera. Lo tomé como un cambio positivo. Puede que, regresando a la Liga Nacional, vuelva el Eugenio de 2019”, comentó. “En un estadio que ayuda a los bateadores y con un equipo que tiene el objetivo de quedar campeón. Me enorgullece que ellos hayan pensado en mí para lograr esa meta”.
Gleyber Torres figura de Nueva York
Un poco más a su izquierda en la mesa estaba Gleyber Torres, quien se mantiene con los Yanquis de Nueva York hasta la fecha, pero que ha estado involucrado en múltiples rumores de canje en años recientes. Es algo que puede pasarle factura a cualquier jugador, tener que lidiar mentalmente con esa incertidumbre, pero el caraqueño ha aprendido a vivir con la duda e incluso a comprender los beneficios de su situación.
“Sabemos que es un negocio y al final del día uno juega también para los otros 29 equipos”, dijo Torres. “Los rumores van y vienen. Siento que cuando llegan es porque llamas la atención. Pero yo, en particular, no le prestó atención. Si va a pasar algo lo dejo en manos de Dios. En este negocio todo puede pasar”, añadió.
El único forastero del grupo, que también incluía a Eduardo Escobar, Anthony Santander, José Rondón, Wilson García, Rougned Odor y Ronald Acuña Jr., era el cubano Yasiel Puig, importado de los Tiburones de La Guaira.
“En Venezuela me siento en casa. Estoy muy agradecido con mi equipo y con las personas encargadas por tomarme en cuenta para este evento”, explicó. “Soy fanático de todos estos peloteros y aunque siento que hoy es todos contra Cuba, estoy muy feliz de estar aquí”.
Pero al final, todo volvía a Cabrera. La atención, el cariño, el respeto. Acuña Jr., a quien muchos apuntan como el nuevo abanderado venezolano en las mayores, es el primero en rendirse a los pies del triple coronado.
Ronald Acuña Jr.: “Gracias a Miguel Cabrera”
«Estoy muy contento de estar acá con todas estas estrellas para celebrar una carrera como la que tuvo Miguel. Hay que dar mucho palo, tener mucha dedicación y disciplina para lograr lo que hizo. Solo puedo soñar con tener una trayectoria parecida a la que él tuvo”, reconoció el jardinero de los Bravos.
Tras sus declaraciones, el más reciente MVP del viejo circuito, al igual que el resto de sus compañeros, se puso de pie para una foto grupal. No sin que antes Suárez tomara la voz de mando una vez más.
“Quiero darle las gracias a Miguel por todo lo que ha hecho por nosotros, por Venezuela y por nuestro béisbol”, indicó el antesalista. “Nada de lo que vivimos hoy podría ser posible sin lo que él ha hecho. De corazón te agradecemos y te deseamos lo mejor en esta nueva etapa de tu vida”.
Oswaldo Guillén: “Miguel me hizo llorar”
Oswaldo Guillén, actual mánager de los Tiburones e invitado especial de la jornada, también hizo acto de presencia en la parte final de la rueda de prensa y recibió la oportunidad de dirigirle unas palabras a Cabrera.
“Vi el primer turno de Miguel Cabrera en el béisbol y en el último me hizo llorar, algo que nunca hago en este deporte”, admitió el primer mandamás latinoamericano campeón de una Serie Mundial. “Estoy muy orgulloso de él, como lo están todos en esta sala”.
Por último, el orgullo de Ocumare del Tuy tuvo una solicitud especial.
“Por favor, apoyen esta liga que está buena”, dijo Guillén sobre la LVBP. “Hay un gran crecimiento y mucho talento. Vamos a apoyarla”.
Por: Prensa LVBP