Unos 120 migrantes centroamericanos protestaron este miércoles afuera de las oficinas del Instituto Nacional de Migración (INM) en el estado mexicano de Oaxaca, sur de México, por un presunto engaño de las autoridades migratorias.
Procedentes de la ciudad de Tapachula, Chiapas, frontera con Guatemala, los migrantes explicaron que llegaron a Oaxaca en autobuses del INM, cuyas autoridades les aseguraron que en este estado les entregarían visas humanitarias, promesa que, dijeron, no les cumplieron, reseñó EFE.
Debido a ello, los más de 100 migrantes abandonaron las instalaciones del INM para bloquear la carretera federal 175, a unos tres kilómetros de la ciudad de Oaxaca, capital del estado, y presionar así a las autoridades para que les entreguen los documentos migratorios para avanzar a la frontera norte de México y luego intentar cruzar a Estados Unidos.
«El martes nos trajeron desde Tapachula porque contaron que en Oaxaca sería más rápido el trámite para la entrega de las visas humanitarias, que nos iban a permitir seguir nuestro camino, pero esta mañana cambiaron las cosas y dijeron que íbamos a permanecer encerrados otros 20 días, como presos», dijo a Efe un migrante de origen centroamericano que pidió omitir su nombre.
El bloqueo de las vías de comunicación se mantuvo unas horas porque el grupo de centroamericanos superaba en número a los agentes del INM, quienes solicitaron la intervención de la Guardia Nacional y Policía Estatal de Oaxaca para obligarlos a reingresar a la oficina migratoria.
En la acción Efe constató que más de la mitad de los migrantes fueron regresados por la fuerza a las oficinas del INM y durante la acción de los agentes, los migrantes se quejaron de abuso y uso excesivo de la fuerza.
«Estoy embarazada y me quieren arrastrar para encarcelarme», gritó la nicaragüense Berenice Ethel cuando agentes de la Policía Estatal la tomaron de los brazos para conducirla al interior de la oficina migratoria.
Finalmente, el total de migrantes fue reingresado a la oficina del INM donde se solicitó el apoyo de la Guardia Nacional para evitar otra manifestación.
El martes, unos 200 migrantes de una nueva caravana bloquearon los cuatro carriles de una carretera en el estado de Chiapas, sureste mexicano, para exigir al INM visas por razones humanitarias.
Los inconformes se sentaron sobre el asfalto a la altura de la comunidad Álvaro Obregón del municipio de Tapachula para impedir la circulación de cientos de vehículos.
La petición de los migrantes de, al menos 10 países, es que las autoridades migratorias otorguen documentos que les permitan transitar de manera libre por territorio nacional hasta llegar a Estados Unidos.
Las protestas ocurren tras la gira del presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, a Centroamérica, donde abordó la migración con sus homólogos.
Por Agencia