A menos de un mes para el inicio del Mundial, Lionel Messi sacó su varita mágica a pasear para doblegar al débil Ajaccio, que sufrió en sus carnes otra jornada más en la que el jugador argentino demostró que su recuperación es absoluta tras firmar un tanto y un par de asistencias a Kylian Mbappé, el otro triunfador del 0-3 final para los parisinos.
Messi espantó definitivamente todos los fantasmas del curso pasado, seguramente el peor de su carrera. Ya no acapara focos negativos. Todo es positivo en el líder de Argentina, que mientras ha iniciado la cuenta atrás para intentar el asalto a la que sería su primera Copa del Mundo, asusta desde la liga de Francia al resto de selecciones.
El jugador del París Saint-Germain se inventó dos pases a Mbappé con los que llegó a las diez asistencias este curso y firmó un golazo tras combinar con su compañero. En apenas tres momentos de un choque dominado siempre de principio a fin por el conjunto parisino, Messi acaparó todo el protagonismo y dio los tres puntos a su equipo, reseña EFE.
Pero antes de su nueva exhibición, la noticia era otra. Con el ‘terremoto’ Mbappé, que parece descontento en el París Saint-Germain, el equipo afrontó una nueva jornada de la Ligue 1 que gobierna con puño de hierro. La carta de presentación de los hombres de Christophe Galtier, no dejaba lugar a dudas de lo que probablemente iba a pasar: invicto en la competición y líder incontestable con nueve victorias en once encuentros, la derrota no estaba escrita en el destino del PSG.
Eso sí, Galtier tuvo que lidiar con algunas bajas importantes. Por lesión, se quedaron fuera Presnel Kimpembe y Nuno Mendes, mientras que por sanción no pudieron jugar Sergio Ramos y Neymar. Esas ausencias le dieron minutos a los españoles que no cuentan demasiado. Carlos Soler, Juan Bernat y Fabián Ruiz aparecieron por la alineación y trajeron aire fresco a su equipo.
Su dominio aplastante se tradujo en el tanto de Mbappé a los 25 minutos. Messi filtró un pase preciso de cirujano entre la defensa del Ajaccio para dejar sólo al ariete galo. Éste, no falló tras fusilar al guardameta Benjamin Leroy e inauguró el marcador con absoluta justicia.
Poco después, Mbappé aún pudo aumentar la renta antes del descanso, pero de forma inexplicable falló un remate prácticamente debajo de la portería que mandó por encima del larguero. Fue el único lunar negro de una noche que ya no tuvo más sobresaltos para el París Saint-Germain.
Todo lo contrario, en la segunda parte, Messi se apuntó a la fiesta anotadora tras combinar con Mbappé, que le dio una asistencia de tacón al argentino para batir de nuevo a Leroy con un quiebre dentro del área pequeña exquisito.
Y no fue el último detalle de Messi, que antes del final, aún tuvo tiempo de filtrarle otro pase a Mbappé. La estrella del cuadro parisino selló el 0-3 final con el que el «30» le mostró de nuevo al mundo, como en los últimos meses, que definitivamente ha vuelto para impulsar al líder de Francia y para soñar con su primer Mundial.
Por: Agencia