Las cuatro mesas de votación del colegio Neptalí Rincón, parroquia Cacique Mara, estuvieron cerradas, por al menos dos horas. La razón: según funcionarios del Consejo Nacional Electoral (CNE), estaban “recalentadas”. Cientos de electores permanecían apostados afuera del centro para ejercer su derecho: la mayoría eran personas de la tercera edad, jóvenes que votarían por primera vez y mujeres embarazadas.
Carlos Bermúdez, ciudadano de a pie, contó que uniformados del Plan República no permitieron el acceso de los electores desde las 11.00 de la mañana y que no daban respuesta de cuánto tiempo tardaría en reactivarse el proceso electoral. Carlos Bermúdez, elector, precisó que, a las 9.00 de la mañana, se averiaron dos máquinas y, a las 11.00, las otras dos.
A las 2.00 de la tarde activaron dos máquinas y comenzaron a entrar los votantes en grupos pequeños.
Ver esta publicación en Instagram
Cuatro horas sin poder votar
La máquina de la mesa 5, en el colegio La Epifanía, dejó de funcionar a las 8.00 de la mañana y, a las 12.00 del mediodía, la reemplazaron. Entretanto, los votantes se apostaron afuera del aula, esperando que el CNE solucionara y ellos pudieran votar.
También, para verificar que no hubiese fraude, como lo reclamó Ricardo Cuba, quien llegó, a las 4.00 de la mañana, al centro de votación. “Lo único que nos informaron es que debíamos de esperar que desde Caracas dieran la orden para sustituir la máquina”.
Hombres y mujeres de tercera edad, y algunos con discapacidades físicas aguantaron calor hasta que ingresaron, de tres en tres, a salón para poder votar.
Por: Ana Karolina Mendoza / Foto: Lizaura Noriega