En compañía de sus hijas y vestidas con majestuosas mantas wayuu, Blanca Perozo, formó parte de las muchas personas que asistieron desde muy temprano a la Basílica de Nuestra Señora de Chiquinquirá para honrar en su día a la patrona de los zulianos.
Blanca tiene 16 años seguidos asistiendo a la misa, siempre vestida con el llamativo traje típico, no cumple promesa, pero siempre va a pedirle a la Virgen de Chiquinquirá.
«Siempre pido por mi familia, por la salud, por los niños que están en la calle» dijo.
Así como Blanca, muchos honraron a La Chinita en su día, demostrando fe, amor y agradecimiento.
Por: Redacción Regionales / Fotos: Lizaura Noriega