Los aberrados sexuales y los pedófilos serán castrados químicamente en Tailandia para reducir el aumento de las tasas de reincidencia.
A los que se le considere probable que cometan más ataques sexuales después de su liberación, se les dará la opción de la inyección, que reduce los niveles de testosterona, a cambio de una pena de prisión reducida, reseñó Mirror.
El procedimiento deberá ser aprobado por dos médicos y los infractores deberán ser monitoreados durante 10 años y obligados a usar una etiqueta electrónica.
El proyecto de ley, que la Cámara Baja aprobó en marzo, fue aprobado la noche de este lunes por 145 senadores, con dos abstenciones.
Todavía requiere otra votación de la casa, luego el respaldo real.
De los 16.413 delincuentes sexuales condenados que fueron liberados de las prisiones tailandesas entre 2013 y 2020, hubo 4.848 que reincidieron, según cifras del departamento penitenciario.
Por Agencia