La academia de ballet Le Studio obsequió un «buen viaje» a los asistentes que llenaron las butacas del Centro Bellas Artes el pasado viernes. Las alumnas de Vanessa Rubio pasearon al público de puntas, con una presentación llena de mucho color y nacionalidad, por Austria, España, Italia, Estados Unidos, Argentina y Venezuela.
A las 7.20 de la noche se abrió el telón. Las hermosas bailarinas de Le Studio de Ballet salieron a deleitar a los asistentes con un show que duró dos horas, en el que sobraron los aplausos y el palpitar de los corazones se aceleró al ver a las pequeñas y jóvenes girando en el escenario al son del Alma Llanera.
Rubio, primera bailarina de ballet clásico, consideró que la puesta en escena, de más de 50 niñas y jóvenes, fue «inolvidable» y que fue el resultado de muchos meses de trabajo.
«Aquí hubo muchísimo esfuerzo, muchísima dedicación, pero se logró. Estoy súper orgullosa de mis alumnas y de los representantes que son quienes nos han apoyado en todo este tiempo», declaró a Foco Informativo, medio patrocinante del evento, la directora de Le Studio De Ballet.
Explicó que la presentación estuvo inspirada en todas las familias venezolanas que están alrededor del mundo que por una u otra razón se han separado, «pero que al final todos queremos estar en un mismo lugar que es Venezuela».
Para Rubio la sorpresa fue la presentación del Alma Llanera con puntas. «El ballet clásico que es la base de todas las danzas da para eso, lo logramos y sé que fue algo inesperado y que gustó demasiado por la reacción del público».
La bailarina dijo que montar la música venezolano fue muy emotivo. «Con esta presentación dejamos un mensaje de esperanza de que en algún momentos todos nos volvamos a reencontrar».
Además, Rubio señaló que lo mejor de su trabajo es tratar de que la danza perdure y se mantenga. «Dar opciones y espacio a la ciudad para que este arte no se pierda».
Por: María Gabriela Villalobos / Fotos: Lizaura Noriega