La rama japonesa de la Iglesia de la Unificación, conocida como «secta Moon«, afirmó el miércoles que es blanco de una campaña «de odio» y ha recibido «amenazas de muerte» tras el asesinato del ex primer ministro Shinzo Abe.
El presidente de la rama japonesa del grupo religioso, Tomihiro Tanaka, fustigó en conferencia de prensa a los medios informativos al afirmar que su cobertura «odiosa» y «falsa» constituyen una «persecución religiosa» y una «violación de los derechos humanos«, recoge la agencia AFP.
El supuesto asesino de Abe, Tetsuya Yamagami, detenido inmediatamente después del ataque al ex gobernante el 8 de julio, perseguía a una «determinada organización» con la que, según él, estaba vinculado Abe.
La policía no identificó a la organización, pero medios locales señalaron que se trata de la Iglesia de la Unificación, a la que pertenecía la madre del sospechoso.
«Nosotros nunca hemos cometido actos violentos ni asesinatos«, pero la iglesia está recibiendo «amenazas de muerte» y algunos de sus miembros se quejan de abusos en su contra, incluido el acoso a sus hijos.
Tanaka lamentó que el actual primer ministro japonés, Fumio Kishida, pidió a los miembros de su gobierno aclarar si tienen relación con la Iglesia de la Unificación.
Sin embargo, admitió que la iglesia tiene intereses en común con el gobernante Partido Liberal Democrático japonés, de Abe, «fundamentalmente una oposición al comunismo«.
Por: Agencia